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Jesús Altuna (Premio Eusko Ikaskuntza-Caja Laboral, 1998)
(Premio Eusko Ikaskuntza-Caja Laboral, 1998) Juantxo Agirre
Itzulpena euskaraz
L a trayectoria humana, cultural y científica de Jesús Altuna Echave encuentra su guía de la mano de José Miguel de Barandiarán que a su regreso del exilio en 1954 representa la continuidad de los trabajos pioneros en el campo de la arqueología y la prehistoria que nos remontan al principio del siglo XX con la figura de Telesforo de Aranzadi.
En efecto, los trabajos sobre las mismas materias ven en el caso concreto de Altuna la incorporación de un joven universitario formado en el campo de las Ciencias Biológicas y va a suponer una orientación nueva y cualificada a las investigaciones que se prolongarán hasta nuestros días de forma ininterrumpida. Jesus Altuna y Juan Plazaola en la entrega del premio Eusko Ikaskuntza - Caja Laboral. (Foto: Arantza Cuesta).
Jesús Altuna obtuvo su licenciatura en 1960 en la Universidad Complutense de Madrid y realizó la tesis doctoral en 1971 con el trabajo titulado “Fauna de Mamíferos de los yacimientos prehistóricos de Guipúzcoa” que fue publicado en Munibe un año más tarde.
Tras trabajar como principal colaborador con Barandiarán entre 1957 y 1972, Altuna organiza su propio equipo de investigación en el seno de la Sociedad de Ciencias Aranzadi en la que ha ostentado diferentes cargos destacando la Presidencia entre 1979 y 1985 y nuevamente desde 1991 a 1997. Desde 1966 dirige la revista Munibe (Antropologia-Arkeologia) que es la principal publicación de las generadas en el País Vasco en materia de Arqueología, Prehistoria y Paleontología.
De este modo, son numerosos los trabajos que ha publicado y es por ello que su obra es muy conocida e imprescindible para cualquier investigador sobre el pasado prehistórico del occidente de los Pirineos.
En cualquier caso, su mérito principal ha sido el de dirigir trabajos e investigaciones interdisciplinares que son pioneros en nuestro medio siguiendo la misma corriente imperante en Centroeuropa de la que Altuna ha recibido notables influencias por su relación personal con muchos investigadores alemanes. Así, han visto la luz trabajos completos sobre yacimientos cuya excavación ha dirigido, como los que llevan por título “El yacimiento prehistórico de la cueva de Ekain (Deba, Guipúzcoa)” y “La cueva de Amalda (Zestoa, País Vasco). Ocupaciones Paleolíticas y Postpaleolíticas” publicados por la Sociedad de Estudios Vascos – Eusko Ikaskuntza en 1984 y 1990 respectivamente, o “Cazadores Magdalenienses en la cueva de Erralla” publicado en Munibe en 1985, por citar algunos entre los muchos que han visto la luz en las principales publicaciones especializadas. Jesus Altuna. (Foto: Arantza Cuesta).
A lo anterior cabe añadir otra vertiente de su obra que resulta fundamental para comprender su trayectoria como es la dedicación a servicios básicos para una completa comprensión del pasado prehistórico, esto es, la catalogación sistemática y consiguiente publicación de la Carta Arqueológica de Gipuzkoa que desde 1982 se ha visto ampliada y corregida en sucesivas ediciones. Por todo ello, ha sido posible el convenio de colaboración que a través de la Sociedad de Ciencias Aranzadi se mantiene con los servicios de Patrimonio del Gobierno Vasco y la Diputación Foral de Gipuzkoa haciendo válido todo el trabajo diario de coordinación de equipos humanos y medios materiales de esta gran labor. Conocimiento, investigación, divulgación y protección de los elementos patrimoniales muebles que se custodian en Gipuzkoa en esta misma Sociedad de Ciencias y requieren una gestión y organización para atender su permanente consulta por parte de nuevos investigadores que se incorporan de este modo a una cadena que garantiza su continuidad.
Tampoco se puede dejar a un lado la importancia que ha tenido en la protección de la cueva rupestre de Ekain, obra maestra del arte paleolítico europeo, la implicación personal de Jesús Altuna tras su descubrimiento en 1969 y los trabajos publicados posteriormente que son fruto de una larga dedicación a este santuario rupestre y posibilitan ahora el proyecto de réplica en el que trabaja con todo entusiasmo.
En su vertiente académica, ha sido profesor ayudante de prácticas de Paleoantropología en la Universidad Complutense de Madrid (Curso 1960-61), Profesor del Seminario de San Sebastián entre 1961 y 1965, Profesor Agregado del Instituto Nacional de Bachillerato de Irún entre 1965 y 1967, Catedrático del Instituto de Bachillerato J.M. Usandizaga de San Sebastián entre 1967 y 1980, y Catedrático de la Escuela Universitaria de Magisterio de San Sebastián desde 1980 hasta su reciente jubilación en 2003. Jesus Altuna y Plazaola. (Foto: Arantza Cuesta) Es miembro de la Sociedad de Ciencias Aranzadi en la que preside el Departamento de Prehistoria y en donde ha formado una importante colección osteológica de comparación iniciada en 1960 y consultada hoy por investigadores nacionales y extranjeros, miembro de la Sociedad de Estudios Vascos en la que pertenece a la Comisión de Excelencia, Presidente de la Fundación Barandiarán, Real Sociedad Española de Historia Natural, Real Sociedad Bascongada de Amigos del País, Unión Paleontológica Internacional, ICAZ (International Council for Archaeozoology), Society for Archaeological Sciences, ICOMOS - CAR (International Committee on Rock Art), Miembro de Honor del Centre de Recherches d'Ecologie Souterraine.
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2004/09/03-10
