108 Zenbakia 2001-01-26 / 2001-02-02

Gaiak

Los montes de Navarra

ELORRIETA, Jose Ignacio

Los montes de Navarra Los montes de Navarra Jose Ignacio Elorrieta 1) Los bosques de Navarra Los estudios recientes de ecología terrestre que describen la tipología de bosques de Navarra reconocen la existencia de al menos 36 tipos básicos de bosques autóctonos, reconocibles por sus características estructurales y funcionales diferenciadas y por una composición vegetal peculiar y autónoma. Un análisis más pormenorizado, muestra la existencia de una gama amplia de subtipos dentro de cada uno de estos bosques originales que es preciso conocer desde una perspectiva de desarrollo sostenible respetuosos con este patrimonio natural forestal navarro. TIPOS DE BOSQUE Bosques Pirenaicos 1. Pinar subalpino de pino negro 1a. con azalea de montaña 1b. con gayuba 2. Pinar montano de pino albar 2a. con erizón 2b. con brezos 3. Abetal montano 3a. con coronilla 3b. con festuca 3c. con brezos 4. Hayedo montano 4a. con escila 4b. con amapola amarilla 4c. con boj 5. Robledal pubescente 6. Fresneda pirenaica 7. Chopera Sauceda pirenaica Bosques Cántabro Atlánticos 8. Hayedo montano colino 8a. con saxifraga 8b. con cárice 8c. con orquídeas 9. Robledal común cantábrico 9a. con brezos 9b. con espino navarro 10. Robledal albar 11. Marojal cantábrico 12. Robledal pubescente 13. Quejigal cantábrico 14. Encinar con laurel 15. Aliseda cantábrica 16. Fresneda cantábrica 17. Olmeda pamplonesa Bosques mediterráneos 18. Carrascal estellés 19. Quejigal estellés 20. Carrascal somontano aragonés 21. Quejigal somontano aragonés 22. Hayedo ibérico 23. Marojal ibérico 24. Carrascal castellano aragonés 25. Coscojar con pino carrasco 26. Choperas y saucedas mediterráneas 27. Tamarizal Aparte de estos bosques autóctonos en Navarra existen Pinares de Pino Laricio con capacidad de regeneración natural, Pinares dePino Insignis y otros bosques de coníferas alóctonas de crecimiento rápido. Este extraordinario muestrario de bosques autóctonos extendidos por las comarcas naturales de Navarra, apreciable a simple vista en paisajes vegetales contrastados entre la Montaña y la Ribera, tiene su fundamento en la estratégica posición de la Comunidad en el marco geográfico de la Europa occidental. Sólo en Navarra, dentro del marco ibérico, se encuentran las tres regiones biogeográficas reconocidas en el paleártico occidental y en el dominio peninsular: La región cántabro atlántica al norte, se caracteriza por los bosques de hoja tierna, representados por los hayedos, alisedas, robledales caducifolios y semicaducifolios que avanzan en su sector meridional hasta las Sierras que cierran por el Sur las cuencas de Pamplona y de Aoiz Lumbier. El extenso dominio mediterráneo al Sur de la zona anterior, se reconoce por sus bosques siempre verdes de carrasca y pino carrasco, los quejigales de hoja esclerófila y lampiña efectúan la transición en este área de la navarra media. Choperas, alamedas, sucedas y fresnedas se reparten por los ríos. El mundo pirenaico alpino se extiende al Este del río Irati y al Norte de la prepirenaica Sierra de Leyre con un elenco de abetales y hayedos con abeto, pinares albares montanos y de pino negro subalpinos. Esta singular encrucijada biogeográfica y muestrario forestal no se repite en Europa y constituye uno de los elementos más significativos de la personalidad natural de Navarra. La extensa gama de tipos y subtipos de bosques espontáneos repartidos en tan sólo 10.391 km2. guarda relación con la variedad de ambientes ecológicos que se originan en un territorio con fuertes contrastes altitudinales, elevada diversidad de rocas y suelos y una gama notable de bioclimas que crean el entramado de factores ambientales esenciales. En armonía con los ambientes existentes se desarrollan los distintos bosques autóctonos navarros, de los que se ha dicho en una aproximaciónfisionómica, son un remedo de los existentes en la península ibérica. En este original marco natural se inserta la actividad humana de transformación forestal ya iniciada en el neolítico que ha modelado a lo largo del tiempo nuevos sistemas ecológicos, algunos de ellos equilibrados y armónicos con la vocación natural de cada zona. Ha dado origen a ecosistemas seminaturales que reconocemos hoy como bosques ahuecados de carrascas, aprovechados de forma integral al modo de dehesas, quejigales con gestión análoga, robledales pedunculados de fondo de valle con intervención ganadera, al igual que algunos marojales y castañares y hayedos. En su estructura reflejan modelos de gestión global, de gran trascendencia para la supervivencia de culturas apoyadas en el manejo de sistemas silvopastorales. Representan un patrimonio que es preciso valorizar y conservar como modelos contrastados de desarrollo sostenible, obtenido por selección multisecular. 2) Situación actual Una idea más actual de la situación de nuestros montes es la reflejada en el avance de resultados del Invenario Forestal 3 de la Comunidad Foral, en donde salvo correcciones de última hora destacarían: INF 3 INF 2 1. Superficies (ha) Monte arbolado 445.671 343.902 Monte arbolado 18.212 28.565 ralo y disperso Total 462.664 372.467 Principales especies (datos aproximados) Fagus sylvatica 121.634 123.248 Fagus sylvatica 25.451 14.730 en mezclas Pinus sylvestris 67.410 64.163 Pinus nigra 30.599 21.971 Quercus robur / 9.721 11.941 Q. petraea Quercus robur / 17.475 11.433 Q. petraea en mezclas Quercus ilex 32.852 29.513 Pinus halepensis 18.001 16.276 Coníf. alóctonas 13.764 15.935 de crecim. rápido y Q. rubra 2. Existencias Todas las especies arbóreas Biomasa arbórea 54.651.039 45.349.058 (m3.) CANT. P. MA. 266.606.811 230.248.092 CANT. P. ME. 441.259.193 360.845.645 3. Comentarios 1. La extensión de montearbolado ha crecido notablemente en relación a la estimada en el IFN2, un 24% en 10 años, especialmente la de mayor densidad de masa, un 30%, mientras que la de monte arbolado ralo y disperso ha disminuido un 36%. 2. Considerando las principales especies arboladas se aprecia que la ocupación de las frondosas autóctonas (Fagus sylvatica, Quercus robur, Quercus petraea y Quercus ilex) ha aumentado sensiblemente, un 9%, con la novedad de que ahora se presentan en masas mezcladas en mayor extensión que hace diez años. 3. Las coníferas nativas (Pinus sylvestris, Pinus nigra y Pinus halepensis) también tienen más cabida que antes, un 13% de incremento, siendo especialmente notable la subida de la del Pinus nigra, un 39%. 4. El grupo de especies alóctonas de crecimiento rápido, tanto coníferas como frondosas,, ha retrocedido en superficie teniendo ahora un 14% menos que hace 10 años. 5. La biomasa arbórea, medida por el volumen maderable con corteza, y la cantidad de pies mayores y menores (existencias) se han incrementado notablemente, un 21%, un 16% y un 22% respectivamente. 6. La especie principal de la comunidad foral, Fagus sylvatica, tiene ahora un 18% más de biomasa arbórea que hace 10 años, pero tiene un 11% menos de cantidad de pies mayores y una disminución del 31% en menores. 7. La segunda especie en importancia es el Pinus sylvestris cuya biomasa arbórea ha aumentado un 22% y cuya cantidad de pies mayores un 8% mientras que hay ahora un 12% menos de menores. 8. Los robles, Quercus robur y Q. petraea, han crecido en biomasa y pies mayores, un 17%, y decrecido en pies menores un 24%. 9. Los tres parámetros de existencias de la especie Pinus nigra han subido, un 17%, un 6% y un 4% respectivamente. 10. Los árboles más característicos de la "Región mediterránea, Quercus faginea, Q. ilex, Q. humilis, Q. pyrenaica y Pinus halepensis, han experimentado un espectacular aumento de todos sus parámetros de existencias con la única excepción de CANT. P. ME. de Quercus humilisque desciende algo. Son especialmente llamativos los cambios de VCC en el Quercus faginea, aumento del 69%, o de CANT. P. MA. de Q. ilex, aumento del 84%. 11. Hay ahora más biomasa de abeto, Abies alba, un 43% sobre la del INF2, y más pies mayores, un 90% pero los menores han perdido un 24%. 12. La evolución del castaño, Castanea sativa, ha sido negativa con pérdidas en los tres parámetros del 24%, del 38% y del 40%. 13. De las especies alóctonas de crecimiento rápido el alerce, Larix spp., ha crecido en biomasa arbórea y cantidad de pies mayores pero ha menguado la de menores enormemente, un 83%; el pino insigne, Pinus radiata, ha bajado en todo y el roble americano, Quercus rubra, sufre una merma en biomasa arbórea, está casi estable en CANT. P. MA. y se incrementa espectacularmente en CANT. P. ME. 14. Los chopos de plantación, Populus nigra, Populus x canadensis, se han acrecentado en VCC y CANT. P. MA. pero se han encontrado en el INF3 muchos menos pies menores que en el otro inventario. 15. La biomasa arbórea por unidad de superficie ha sufrido una ligera disminución de un 3% pero esto no significa una pérdida de calidad de los ecosistemas pues una parte importante de las nuevas superficies de monte arbolado corresponden a estratos de plantaciones jóvenes o formaciones en desarrollo que estuvieron algo relegadas en el INF2; lo mismo pasa con la cantidad de pies. La categoría de los montes navarros se muestra en los 10 estratos con más de 100 metros cúbicos de madera por hectárea o en aquellos de frondosas autóctonas con crecimientos de 4, 5 y 6 metros cúbicos por hectárea y año. 16. La Comunidad Foral de Navarra tiene una población de derecho de 530.819 habitantes por lo que, teóricamente, podrían adjudicarse 0,87 a arboladas, 103 m3 de madera, 502 árboles grandes y 831 pequeños, a cada uno de ellos. 17. Si colocamos las 50 privincias españolas de más a menos biomasa arbórea, Navarra se situaría la primera ocupando también uno de los primeros puestos en superficieforestal arbolada, cantidad de pies y crecimientos. Jose Ignacio Elorrieta, Director General de Medio Ambiente del Gobierno de Navarra Euskonews & Media 108.zbk (2001 / 1 26 / 2 2) Eusko Ikaskuntzaren Web Orria