617 Zenbakia 2012-03-16 / 2012-03-23
Durante buena parte del siglo XX convivieron en la ciudad de Valencia, la pelota valenciana, que se jugaba en calles y trinquetes, con la pelota vasca que se jugó en frontones construidos con este proposito como fueron el Frontón Jai-Alai, el Frontón Valenciano y el Chiqui-Jai. Además se practicó la pelota vasca en el frontón del Campo de la Cruz de los Caídos del que hay pocas referencias y en el que construyó la Obra de Educación y Descanso en el barrio de Benimaclet.El frontón Jai-Alai o Alameda
El “Gran Frontón Valenciano Jai-Alai”, popularmente conocido como “el Jai-Alai” o “el Alameda”, fue promovido a finales del XIX por los empresarios Felipe Mampel y José Rodríguez, siendo su arquitecto Antonio Ferrer Gómez y se encontraba, en lo que entonces eran las afueras de la ciudad, en la calle Jai Alai, nº 6, en la actualidad calle Pintor Peiró.
Se inauguró el 11 de marzo de 1893 con una partida que enfrentó a Saturnino Echeverria (Muchacho) y Pedro Echeverria (Tandilero) contra Juan José Gorostegui (Irún) y Cosme. Tanto “Irún” como “Tandilero” se habían formado como pelotaris de Cesta Punta en Argentina, lugar donde Melchor Guruceaga había perfeccionado el juego. Seguramente el detalle más curioso de esta partida, a 50 tantos, fue el descanso de los pelotaris para comer y beber cerveza.
Anuncio de partidas de valencianos y vascuenses en el Frontón Jai-Alai de Valencia.
El frontón celebraba partidas a las 4 de la tarde y no tuvo clara la línea deportiva pues alternaba las partidas de cesta-punta, con partidas de pelota a mano, desafíos entre vascos y valencianos, demostraciones de esgrima, comidas, mítines, representaciones de ópera, etc. Competía con los trinquetes de pelota valenciana de Pelayo, inaugurado en 1868, y el de Juan de Mena inaugurado en 1877.
El 20 de marzo de 1893 se jugó una curiosa partida en la que José Blasco, Francisco Pepín y José Malada se enfrentan a Pedro Osoro, Luís Echeverria y Raimundo Arguiarro, a 30 tantos, con 12 pelotas de vaqueta, una partida a mano mixta de valencianos y vascos en los que los valencianos podían usar guantes, como en la actualidad lo hacen los pelotaris belgas, y los vascongados debían jugar a mano limpia, que después jugarían otra partida a cesta punta.
Hay noticias de partidas de cesta punta, de forma ininterrumpida, desde 1893 hasta 1897. En 1927 se encuentra en desuso el frontón y no es hasta 1971 cuando volvemos a encontrar noticias, en concreto la celebración del trofeo “Anselmo Gil” de pelota a mano, pala, pala corta y frontenis. Después en 1973, se creó la “Escuela de Cesta Punta de Valencia”. La escuela funcionó desde 1973 hasta 1977, dirigida por el ex-puntista valenciano Mario Garrote Bisquert, quien contó con escasos apoyos, hasta el punto que tuvo que hacer de cestero. Con todo en 1976 se celebro el primer Campeonato de Valencia de Cesta Punta entregando los trofeos Jacinto Quincoces, ex futbolista, y gran amigo de Mario.
En 2005 fue derribado el frontón que desde hacía años se había convertido en un gimnasio. El frontón Valenciano
El “Frontón Valenciano” se encontraba en el nº 9 de la Calle General San Martín, y fue promovido por un grupo de inversores catalanes y proyectado por el arquitecto Javier Goerlich. Tenía un aforo de 1.200 personas, carecía de columnas, y sus dimensiones eran de 60,5 m de largo, por 10 m de ancho y 17 m de alto, con contracancha de corcho de 7 m.
Interior del Frontón Valenciano proyectado en 1933 por Javier Goerlich.
Foto: Fundación Goerlich
El domingo 12 de noviembre de 1933, día de la inauguración, se jugaron dos sesiones, la vespertina comenzó a las 16 h y enfrentó a Azcue y Guisasola contra Miguel y Basurco, y a Irún e Iriondo contra Chaparro y Marcue. Por la noche a las 22 h 15 jugaron Unanue y Lizarribar contra Zulaica y Hernani, y Mendía y Beitia contra Anacabe y Loyola.
En la temporada 33-34 el cuadro de pelotaris lo componían un total de 40 jugadores, 20 delanteros y 20 zagueros. De las partidas disputadas podemos recomponer parte del cuadro de jugadores: Urrutia (“Totolo”), Fernando, Azcue, Miguel, Irún, Chaparro, Unanue, Zulaica, Mendía, Anacabe, Verdasco, Unarme, Martínez, Cantabria, Basurco, Marcue, Lizarribar, Hernani, Loyola, Iriondo, Guisasola, Beitia, Echenique, Carmelo y Oenega.
En la temporada 34-35 jugaron: Urrutia (“Totolo”), Unanue I, Chaparro, Zulaica, Galárraga, Arrrizabalaga, Deva, Iriondo II, Aramendi, Chacartegui II, Vergara, Iraola, Unanue II, Bilbao, Agustín, Aratibel, Comin, Echenique II, Pistón II, Linares, Echenique, Marcue, Erdazola IV, Basurco, Goenega I, Ansola, Garate, Guisasola, Chacartegui I, Hernani, Aristando, Jesús, Goenaga II, Nazabal, Sarazola II, Echarren, Bettia, Urgandi II y Barbera.
Parte del cuadro de la temporada 1936-1937 del Frontón Valenciano.
Foto: José Agustin Larrañaga
En el cuadro de la temporada 35-36 había ya 7 jugadores valencianos (Guara, Linares, Selfa, García, Vidal, Muñoz y Pérez) y en el de la temporada 36-37 estaban entre otros: Marcos Guisasola Baskarán “Guisasola” (Que se casó con la valenciana María Teresa Simó), Garro, Arratibel I, Unanue, Arantzamendi, Urrutia y Fidel.
Se jugó en el frontón durante toda la Guerra Civil aunque las noticias escasean y en la temporada 39-40 el Club Valenciano de Pelota Vasca, que había organizado matinales de aficionados desde su inaguración, queda adscrito a Falange. Se contrataron cuadros de pelotaris las temporadas 39-40, 40-41 y 41-42, no así las temporadas 42-43 y 43-44, por lo que debió de estar cerrado el frontón a los profesionales, jugándose la temporada 45-46 en la que la última. Frontón Chiqui Jai - Txiki Jai, palacio de la raqueta
El Frontón Chiqui, popularmente “la bombonera”, se encontraba en la calle Calvo Sotelo nº 5, en la actualidad paseo de Ruzafa. Era un frontón corto (29m x 9m) de 500 localidades que acogió partidas de pelotaris femeninas con raquetas o señoritas raquetistas.
Lo inauguraron el 2 de enero de 1942 Oñasi y Hortensia que vencieron a Conchita y Sena. Por el Chiqui pasaron muchas raquetistas, famosas en la época, entre ellas: las hermanas Arrate, Bene, las hermanas Barrutia, Chiquita de Motrico, Chiquita de Anoeta, Eibarresa I, y Rosita, que era valenciana. Jugadores valencianos de cesta punta
Mario Garrote con 17 años en el Frontón Colom de Barcelona.
Foto: Familia Garrote
En el casi un siglo que estuvo presente la Cesta Punta en Valencia, nacieron un gran número de jugadores locales, y algunos de ellos cosecharon éxitos en el campo profesional como los hermanos Guara o Mario Garrote.
José Guara Nadal (Gran Guara) nació en Valencia el 21 de agosto de 1923, fue hijo de José Guara, pelotari de “Escala i Corda”. Debutó en el Frontón Valenciano en 1937, jugó en 1940 en el Novedades de Barcelona, en 1946 en al Recoletos de Madrid y a partir de 1947 en México y La Habana.
Manuel Guara Nadal (Guara II, Guarita) nació en Valencia el 1 de enero de 1930, hermano de José Guara. Debutó en 1943 en el Frontón Novedades de Barcelona, jugo en 1946 en el Recoletos de Madrid, en 1947 en de México, y hasta 1970 en Florida, La Habana y Méjico. Falleció el pasado 19 de marzo de 2011 en Miami.
Mario Garrote Bisquert nació en Favareta (Valencia) el 8 de septiembre de 1926. Debutó como profesional a los 17 años en Frontón Colom de Barcelona. Jugó en los frontones de Zaragoza, Palma de Mallorca, Recoletos de Madrid, Tánger, La Habana, Miami y en el Jai Alai de Manila. En 1965 fue Seleccionador Nacional de Pelota de Filipinas, jugó el mundial de Montevideo y los Juegos Olímpicos de México. En 1972 se retira y regresa a Valencia donde se hace cargo de la escuela de cesta-punta del Frontón Alameda. Falleció el 31 de marzo de 1994 en Valencia.
Otros jugadores profesionales de cesta punta que jugaron los años 30 en el Frontón Valenciano son: Lloco II (Hijo del pelotari Lloco el “León de Burjassot”) que jugó en La Habana, José Selfa Alberola (Selfa), Vicente Linares Domingo (Linares), Francisco García Morte (García), Vicente Vidal Lozano (Vidal), Vicente Muñoz González (Muñoz), Julián Pérez de la Higuera (Pérez) y Barberá.Conclusiones
La pelota vasca, estuvo presente en Valencia casi un siglo, construyéndose para su práctica tres frontones, todos ellos desaparecidos en la actualidad, viviendo su época dorada en los años 30 que vio nacer toda una generación de puntistas locales.
Mis más sincero agradecimiento a la Fundación Goerlich, a José Maria Urrutia y a José Luís Garrote por los datos aportados, que han sido complementados con las hemerotecas del Mundo Deportivo, el Mercantil Valenciano, La Vanguardia Las Provincias y ABC.