109 Zenbakia 2001-02-02 / 2001-02-09

Gaiak

Asociacionismo No Lucrativo

OIARZABAL FERNÁNDEZ, María Angeles

Asociacionismo No Lucrativo Asociacionismo No Lucrativo Mª Angeles Oiarzabal Fernández Es un hecho incuestionable el espectacular crecimiento de las ONGs en las dos últimas décadas. La cuestión no puede contemplarse como novedosa sino como cambio del contexto religioso por el civil. Se analizan las bondades de las ONGs, en todos los campos sociales, pero se advierte del peligro de participar consciente o inconscientemente en el debilitamiento del estatus de ciudadanía. Este debilitamiento supondría un hecho importante; canjear una cuestión de derecho por una dimensión benéfico paternalista pre Estado de Bienestar. Existe un consenso generalizado entre los estudiosos del llamado Tercer Sector, Asociaciones no Lucrativas, Organizaciones No Gubernamentales, o "Sociedad Civil" sobre el espectacular crecimiento, difusión y protagonismo socioeconómico que han alcanzado estas organizaciones en las dos últimas décadas. Este protagonismo viene impulsado y alimentado por distintas vías sociales, pero sobre todo, y cada vez mas, por las Administraciones tanto locales, nacionales como internacionales. El reclamo participativo de los distintos Gobiernos en el campo de materias relacionadas con el bienestar social hacia estos grupos civiles es constante y manifiesto. Baste citar como ejemplo, las recientes Disposiciones que en este sentido aparecen en el BOPV (29/9/2000), donde se aprueba el reglamento de funcionamiento del Censo General de Organizaciones del Voluntariado y donde se regulan aspectos relativos sobre estos grupos. A lo largo del citado texto, la propia Administración reconoce la necesaria relación entre las Administraciones Públicas y las Organizaciones sin ánimo de lucro, basadas en la complementariedad, colaboración y participación, especificándose la imposibilidad de dar respuesta a las nuevas necesidades desde la responsabilidad absoluta de la Administración. Es mas, se reconoce que solo mediante la corresponsabilidad compartida entre ésta y la solidaridad socialvoluntaria se puede construir una sociedad mas justa e igualitaria. Es similares términos se ha pronunciado recientemente en Bruselas (10/10/00) el Consejo de la Unión Europea (2000) 649 final, por la que se establece un programa de acción comunitario para luchar contra la discriminación múltiple. Así, en varios artículos del programa (artículo 2 párrafo 2, artículo 5 punto 1 b, artículo 9 punto 2 a) se recurre a la corresponsabilidad de las ONGs para la puesta en práctica seguimiento y evaluación del programa, considerándose indispensable la financiación básica de las ONGs que actúan con eficacia en este ámbito. El deseo de una aproximación estadística cuantitativa fiable sobre el crecimiento de estas Organizaciones sin Animo de Lucro, se ha visto rodeado de una serie de dificultades metodológicas insalvables. Esta problemática se suscita principalmente desde una serie de arbitrariedades incluidas en la categorización asociativa, arbitrariedad generada desde la heterogeneidad conceptual y terminológica que acompaña a este sector emergente (Tercer Sector). Por lo tanto las divergencias cuantitativas , no responden en general a una falta de rigor del investigador, sino a cuestiones derivadas de la falta de consenso conceptual. Según Zaidi por ejemplo, solo considera ONGs aquellas organizaciones que además de no tener fines lucrativos, ser privadas y nacionales, están implicadas en el trabajo para el desarrollo en los países subdesarrollados. Esta definición dejaría fuera de cómputo a todas las ONGs del Norte. Por el contrario, la definición utilizada en este sentido por el estudio comparativo internacional, diseñado por el equipo de la Universidad de Johns Hopkins en el que hemos participado a nivel español , es sustancialmente diferente ya que contempla la necesaria presencia de cinco cuestiones; a) que sean organizaciones formales, b) que sean autónomas, c) que no repartan beneficios, d) que sean privadas y e) que tengan un cierto nivel de aportaciones voluntariasde tiempo y dinero. A estas divergencias conceptuales y estadísticas debe añadirse otro sesgo del propio personal asociacionista debido a un registro de altas y bajas poco actualizado. A pesar de estas dificultades, los datos que se presentan a continuación no dejan de tener un cierto interés ilustrativo y aproximativo al evento. Fuente: Estudio sobre el Sector Emergente. Obra citada. pp. 120 En el gráfico se observa el rápido crecimiento del número de asociaciones sin ánimo de lucro. Pero este crecimiento se intensifica en los últimos cinco años de manera muy superior al crecimiento habido en una década. No obstante seguimos recordando que estas cifras están singularmente mermadas por cuestiones metodológicas. BONDADES Y PELIGROS DEL ASOCIACIONISMO NO LUCRATIVO El singular crecimiento de las ONGs ha generado la creencia de ser éste un fenómeno novedoso. Autores estudiosos del tema (Orella, J.L., Gutiérrez, M) sostienen sin embargo, que la presencia y tradición de Órdenes Religiosas, Cofradías, Hermandades, Mutuas etc..., demuestra sin lugar a dudas que valores universales de solidaridad, generosidad, cooperación y ayuda al necesitado, han tenido profundas raíces en España a lo largo de los siglos. Por ello, salvo en la etapa franquista donde esta actividad estaba restringida y controlada, no puede aceptarse la novedosidad del evento. El asociacionismo de carácter no lucrativo, de corte benéfico paternalista, era practicado de manera especialísima por las órdenes religiosas, lo cual no excluye la presencia de otros grupos no religiosos. Estas órdenes religiosas ejercían sus actividades tanto en sus países de origen como en otros países subdesarrollados. El formidable número de vocaciones religiosas que se dieron en España después de la Guerra Civil, permitía a estas Organizaciones No Gubernamentales dotarse de un fuerte capital humano para llevar adelante sus actividades. Debido al proceso de modernización y su correspondiente secularización, esta situación se ve modificadade manera drástica, lo que no significa que estos valores universales de mano tendida hacia el necesitado desaparezcan. Lo que sucede es que entran nuevos actores en escena. Estos valores siguen vivos en determinados segmentos de la población, si bien pierden la dimensión religiosa, situándose en el espacio civil. Podemos hablar por lo tanto de un misionerismo civil que sustituye en gran manera al misionerismo religioso. Son estos en su mayoría un voluntariado juvenil en versión moderna, que toman el relevo desde la nueva plataforma de la modernidad. Ellos configuran un misionerismo civil que va a cubrir viejas necesidades mayoritariamente, y nuevas necesidades minoritariamente. Un misionerismo civil que junto a su vocación de ayuda benéfica, altruista, sacrificada, genera intra e intergrupos oportunidades de identidad, integración conexión del yo individual con el yo social, experiencia laboral, trabajo, estatus sociomeritorio e incluso algo de aventura. En términos generales, podemos reconocer que además de lo expuesto con anterioridad , estas asociaciones ofrecen una respuesta ágil a problemáticas críticas de solución inmediata, supliendo las dificultades que todo trámite burócrata estatal genera. Aparte de las referidas e incuestionables bondades, no podemos olvidar que existe un Estado de Bienestar, mas o menos desarrollado, pero con un importante elemento a considerar ; el estatus de ciudadanía que dota a cada individuo de una serie de derechos civiles, políticos y sociales. Es por lo tanto el Estado el garante, el que ha asumido el compromiso de proporcionar bienestar social a sus ciudadanos. Si en gran parte esta responsabilidad se descarga en las ONGs, estamos cambiando no el que sino el como. Estamos retrocediendo a la etapa pre Estado de Bienestar, donde la cobertura de las necesidades se realizaban dentro de un entorno de beneficencia y paternalismo, colaborando consciente o inconscientemente al debilitamiento de la dimensión de derecho implícita en el estatusde ciudadanía. El ímpetu de entrada en escena de las ONGs para la cobertura de todo tipo de necesidades, el arrope presupuestario, la convocatoria y reclamo de colaboración, corresponsabilidad y complementariedad lanzada desde las distintas Administraciones nacionales y europeas, nos generan al menos el temor de que se escondan intereses solapados que ayuden a los Gobiernos neoliberales al desmantelamiento sin conflictos del Estado de Bienestar. No es de recibo manejar argumentos sobre la ineficacia del Estado para cubrir sus compromisos, o de que las ONGs, la "sociedad civil" son mas eficaces y eficientes en la distribución de ayudas que lo que éste, el Estado lo es. Si no queremos colaborar al cambio del como, quizás tendríamos que aprovechar esta importante movilización civil, para reclamar responsabilidades y una auténtica reestructuración de los poderes públicos. (1) Zaidi, S.A. (1998) "El Fracaso de las Organizaciones No Gubernamentales" . en "Zona Abierta" 82/83 pp. 75 85 (2) Estudio panel sobre "El Sector Emergente" (2000) realizado en colaboración con la Universidad de Johns Hopkins, patrocinado por la Fundación BBV, dirigido por Ruíz Olabuenaga, J.I. y figurando como equipo investigador; Oiarzabal , Mª. A. Casado, D. Jiménez, A. Orella , J.L. Mancisidor, M. Labrador, C. Soto, S. y Fernández, A. Mª Angeles Oiarzabal Fernández, Catedrática E.U. de la UPV/EHU Departamento de Sociología Fotografías: Página Web Médicos del Mundo y Cooperación Internacional Euskonews & Media 109.zbk (2001 / 2 / 2 9)) Eusko Ikaskuntzaren Web Orria