10 Zenbakia 1998-11-13 / 1998-11-20

Gaiak

Orquestas populares en Euskal Herria

BAGÜÉS, Jon

Orquestas populares en Euskal Herria Orquestas populares en Euskal Herria Jon Bagüés En un trabajo del mismo título presentado hace diecisiete años dábamos un repaso a los conjuntos instrumentales utilizados en la música tradicional vasca. Desde entonces poco es lo que hemos avanzado en el estudio del tema, en oposición a la importante cantidad de trabajos relacionados con los instrumentos específicos, entre los que cabe destacar los trabajos de Juan Mari Beltrán. 1 Instrumentrista Aunque resulte paradójico el conjunto más reducido lo componen dos instrumentos interpretados por la misma persona, como ocurre con el txistu y el tamboril o la txirula y el ttun ttun. Su existencia entre nosotros está probada ya en la edad media. Dúos Desde el renacimiento hasta nuestros días se suceden y coexisten variadas parejas de dos instrumentistas, desde los de la misma familia, dos "tamboriles", o dos albokas, a lo que era más corriente un instrumento de viento: txistu, txirula, alboka, dulzaina, con uno de percusión, tambor, pandero, sin olvidar combinaciones más inusuales: txirula y violín, violín y guitarra, o adaptaciones a instrumentos modernos: clarinete y tambor, y por supuesto la triki tixa. Tríos También en los tríos instrumentistas hay agrupaciones clásicas, 2 txistus y atabal, y sobre todo 2 gaitas o dulzainas y tambor, con alguna ligera variante como 2 clarinetes y tambor, a grupos más infrecuentes: txirula, acordeón y atabal (con la variante del clarinete en vez de la txirula); txistu, violín y tambor o dos txirulas y violín. Cuartetos Sin duda el conjunto de cuatro instrumentistas más tradicional en Euskalerria es lo que se denomina la Banda clásica de txistus, es decir, dos txistus, silbote y atabal. Seguimos sin tener claro cuándo comienza esta práctica, aunque podríamos datarla en el primer tercio del siglo XIX. Esta ha sido la formación intrumental que a partir de la creación de la Asociación de Txistularis en 1927, empezó a extenderse en no pocos municipios delPaís Vasco, profesionalizando a no pocos txistularis. Otros conjuntos tradicionales Como puede comprenderse hay noticias de muchas otras combinaciones instrumentales de las que no puede decirse que hayan formado tradición, aunque de una u otra manera han estado muy presentes a lo largo de la historia. Uno de los casos sería la presencia de los clarines en actos protocolarios tanto en Alava como en Gipuzkoa, Bizkaia y Navarra. Actúan normalmente un par de instrumentistas, bien acompañados de tambores, bien en conjunción con bandas de txistularis. Existen por otra parte tradiciones referidas a áreas geográficas concretas que han desarrollado combinaciones instrumentales particulares. Uno de los casos es el de las pastorales suletinas. La música destinada a las danzas las interpretan un txirulari acompañado del tambor, mientras que el resto de las marchas, entradas, salidas... las interpretan un conjunto variable de instrumentos, habitualmente de viento (aunque hay datos del siglo pasado en el que se habla también del violín), acompañados igualmente de percusión. Muy próximas al caso anterior serían las combinaciones instrumentales de danzas en el País Vasco Francés, tanto en danzas suletinas, como bajo navarras. Los conjuntos son muy variables, aunque prevalecen los instrumentos de viento, acompañados siempre de percusión. Caso e influencias diferentes presenta el ámbito de la jota navarra. Para su interpretación se utilizan sobre todo los instrumentos de cuerda pulsada, guitarras, bandurrias y laúdes, aunque no faltan referencias a usos combinados con instrumentos de viento o violines. Todo lo escrito hasta ahora se podría aplicar a la música tradicional que hasta hace pocas décadas se vinculaba a conjuntos instrumentales. El desarrollo por una parte de los propios instrumentos tradicionales gracias a su enseñanza sistematizada, y por otra parte la irrupción de la corriente musical del folk en los últimos treinta años, ha contribuído a cambiar y ampliar la variedad desonidos instrumentales. Los conjuntos de txistu son ahora de mayor número, ampliando la percusión e incluyendo no pocas veces otros instrumentos. Igualmente la existencia de espectáculos de danza vasca ha supuesto un progresivo aumento de la participación de instrumentos diferentes en conjuntos variados. Pero donde más ha evolucionado el color instrumental, fundamentalmente en esta década de los noventa, es en la participación de instrumentos populares vascos en conjuntos instrumentales mixtos de instrumentos tanto tradicionales como modernos (guitarras eléctricas, baterías...), tanto instrumentos utilizados en el País Vasco, como instrumentos tradicionales de otros ámbitos geográficos (desde las gaitas irlandesas a instrumentos norteafricanos). La preparación de los instrumentistas y el consiguiente perfeccionamiento en los instrumentos (principalmente en el tema de la afinación, imprescindible para su utilización en combinación con instrumentos de afinación estable) ha logrado tal variedad de combinaciones instrumentales que no asistimos sino al comienzo de un período de grandes cambios para la música popular vasca. El camino que tomen en adelante los llamados grupos "folk" decidirá el color que el siglo que viene adjudicará a la música popular de nuestro siglo. De momento estamos en este ámbito en pleno período experimental. Jon Bagüés, Técnico de Eresbil