377 Zenbakia 2007-01-12 / 2007-01-19

Gaiak

Cluster de Sociolingüística: normalización lingüística, el cambio a través del conocimiento

SALABERRIA, Iker

Coordinador del Cluster de Sociolingüística BELAXE. ITZULPEN ZERBITZUA



Aun cuando se trate de una asociación nueva, no se puede decir que el Cluster de Sociolingüística haya empezado su andadura recientemente. Lo cierto es que durante su proceso de creación ha heredado el rico legado de distintas instituciones y personas. Los primeros pasos para llevar a cabo este proyecto parten de las reflexiones en torno a una idea propuesta en su día por el doctor Erramun Barkox —que en aquella época era profesor de la UPV-EHU y presidente de Euskal Kultur Erakundea— a su vuelta de Quebec, y que no pudo llevarse a efecto: la conveniencia de crear en nuestro país una institución similar al CIRB (Centre International de Recherche sur le Bilinguisme, actualmente CIRAL). Esta reflexión se retoma con fuerza en 2000, por iniciativa del Consejo de Redacción de la revista de sociolingüística Bat.

Esta iniciativa del Consejo de Redacción de la revista se materializó en su momento en dos líneas de trabajo:

Por un lado, la creación de la sociedad dinamizadora, cuya función sería promocionar y desarrollar la idea del Instituto de Sociolingüística: la “Sociedad SEI”. Esta sociedad estaba formada principalmente por técnicos en normalización lingüística, profesores universitarios y suscriptores de la revista de sociolingüística Bat.

Por otro lado, la puesta en contacto con diversas organizaciones sociales y de los sectores académico, institucional y privado, para obtener una primera impresión sobre el nivel de consenso y acuerdo alcanzado en torno a la idea expuesta.

Así, a partir del año 2000 diversos agentes hemos aunado esfuerzos cara a la creación del Instituto de Sociolingüística. Fruto de esos esfuerzos, en marzo de 2004 la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de Mondragon Unibertsitatea, la Universidad Vasca de Verano (área de Sociolingüística), La Asociación Profesional de Técnicos de Euskara de Navarra, la Consultoría ELHUYAR, la Cooperativa EMUN, la Sociedad de Estudios Vascos, la Sección de Psicología Social y Metodología de Ciencias del Comportamiento de la UPV-EHU, la Sección de Sociología II de la UPV-EHU y la Sociedad SEI formaron la asociación Cluster de Sociolingüística. Pero, ¿para qué sirve una asociación de ese tipo? ¿Qué aportación puede hacer algo así a la normalización del euskara?

Xabier Lete.

Foto: Justy García Koch Como dice una conocida canción de Xabier Lete: “... el trabajo de los hombres es sabiduría, el cambio a través del conocimiento...”. Cuando nació el Cluster de Sociolingüística se impuso a sí mismo un lema a modo de misión: “... el desarrollo de los conocimientos sobre sociolingüística para la recuperación y normalización del euskara...”. Es decir, el objetivo que pretendemos alcanzar es “el cambio a través del conocimiento”. Existen distintas organizaciones que llevan largos años trabajando en el ámbito de la normalización lingüística. Pero los que decidimos crear el Cluster de Sociolingüística vimos una carencia a la que no respondían todas esas organizaciones: los procesos de normalización lingüística, en tanto que son procesos sociales, cómo funcionan, qué es lo que los impulsa hacia un lado (la normalización lingüística) o a otro (la muerte del idioma), en función de qué parámetros utiliza la gente una lengua u otra para comunicarse... Es decir, estudiar, investigar y profundizar en el conocimiento de esos temas fue la razón principal que nos llevó a crear el Cluster de Sociolingüística. En definitiva, profundizar en los conocimiento del campo de la sociolingüística, que es la que estudia todas esas cuestiones, para poder cambiar posteriormente la situación del euskara. O dicho de otra forma, para poder utilizar posteriormente los conocimientos adquiridos en favor del proceso de normalización del euskara.

Dos cosas estaban claras, por tanto. Por un lado, como afirmó Miquel Strubell en el simposio Euskal Soziolinguistika Institutua Sortzen, “el 95 % de los que estamos aquí no queremos hacer investigación pura y dura, no queremos conocer la realidad, queremos cambiar la realidad”. Por eso le hemos dado tanta importancia desde el principio a la sociolingüística aplicada, o mejor dicho, a la aplicación de la sociolingüística. Y, por otro lado, también hemos tenido claro que el proceso de normalización del euskara, como el de cualquier idioma, es muy complicado y complejo y que es imprescindible profundizar en el conocimiento y aprovechar lo mejor posible nuestros esfuerzos y energías en este empeño al que nuestro país ha dedicado tantas energías y esfuerzos.

Así, aunque es importante ponerse manos a la obra, no lo es menos saber cómo hacerlo. Y si bien en nuestro país el entusiasmo para ponerse en marcha está profundamente enraizado desde hace mucho tiempo, nos parecía que se habían realizado demasiado pocos esfuerzos por profundizar en un conocimiento de la sociolingüística que nos ayudara a concretar la forma de reflexionar y abordar ese proceso. Por eso, en nuestra misión decimos lo siguiente: “construir puentes entre el ámbito científico y el aplicado y formar redes de encuentro para la reflexión y para la colaboración con los agentes del sector”.

Pero, al llevar a cabo todo esto, o para poder llevar a cabo todo esto, en nuestra opinión es imprescindible tomar como base de trabajo ciertos principios o, como nosotros los llamamos, ciertos valores. Los que tiene establecidos el Cluster de Sociolingüística son los siguientes:

1. Actuar teniendo en cuenta a la comunidad lingüística del euskara en su totalidad.

2. Competencia solidaria: partiendo de interés particulares, desarrollar proyectos colectivos.

3. Respetar y reforzar las actividades de los socios.

4. En general, evitar la concurrencia y buscar complementariedades.

5. Lograr un alto y elaborado nivel de imagen y comunicación.

6. Trabajar con especial atención la iniciativa aplicada.

7. Los miembros conseguirán beneficios y serán mesurables.

8. El Cluster actuará con responsabilidad social, difundiendo sus frutos a toda la sociedad.

Por tanto, además de asumir la responsabilidad social que implica nuestra misión (la normalización del euskara), existen también diversos criterios relativos a la construcción de puentes entre nuestros socios: competencia solidaria, obtención de beneficios por los miembros, evitar la concurrencia... Disposición espacial de los dialectos del euskara según el mapa lingüístico de Luis Luciano Bonaparte

Y es que uno de nuestros objetivos de origen fue el de atraer hacia nosotros a las organizaciones e individuos que se dedican al campo de la sociolingüística. No por el mero hecho de acercarlos o tenerlos alrededor, sino porque creíamos firmemente que los años de experiencia y la sabiduría de estas personas y organizaciones iban a sernos útiles. Porque, como hemos dicho anteriormente, veíamos muy claro que en esta sociedad actual cada vez más cambiante, para hacer frente a los desafíos que teníamos enfrente, era necesario tender puentes entre el ámbito científico y el aplicado. Y no solo eso, sino también crear redes de encuentro entre diferentes organizaciones y asociaciones que de una manera u otra trabajan en el terreno de la sociolingüística, con vistas a la euskaldunización. Por eso, por nuestra parte hemos intentado desde el principio encauzar la participación de organizaciones pertenecientes a diversos ámbitos. Así, entre nuestros socios tenemos departamentos universitarios, ayuntamientos, instituciones de formación e investigación, empresas de consultoría y asociaciones profesionales. Y por eso precisamente decidimos llamar Cluster a nuestra asociación.

Al fin y al cabo, un Cluster es una agrupación formada por entidades, empresas e instituciones que tienen en común diversos vínculos, relaciones e intereses compartidos. El Cluster, aceptando la competencia entre miembros, busca nuevas colaboraciones con el objetivo de incrementar dinámicas sectoriales y afrontar proyectos a los que no se puede responder de forma individual. La complementariedad y los intereses comunes de los miembros crean un valor superior a la suma de las partes, es decir, los Clusters crean sinergias. Por tanto, solo eso y todo eso es el Cluster de Sociolingüística. Pero esta asociación que acaba de comenzar su actividad no puede quedarse mirando hacia atrás. Los próximos años serán decisivos de cara al proceso de normalización del euskara. Existen numerosos factores que están produciendo y acelerando los cambios: globalización, construcción de la Unión Europea, creciente movimiento de inmigración, procesos de redefinición de estados, desarrollo de las nuevas tecnologías, situación sociopolítica de Euskal Herria... Todo esto, sin duda, tendrá una notable influencia en el proceso de normalización del euskara. Por lo tanto, nuestro reto es analizar y conocer lo más exactamente posible la influencia que estos procesos van a tener en el idioma para que, al final, podamos conseguir que perjudiquen lo menos posible al euskara o, incluso, lo beneficien. Por consiguiente, es imprescindible dar al sector de la sociolingüística la importancia que le corresponde y el desarrollo necesario, cada uno desde el ámbito y el nivel de esfuerzo que le corresponda, pero teniendo claro que todos tenemos algo que hacer: la universidad, la administración, las empresas de consultoría... están en juego muchas décadas de trabajo y esfuerzo.