583 Zenbakia 2011-06-17 / 2011-06-24
En la ladera del monte Beloki, a dos kilómetros del actual casco urbano, se construyó la primitiva parroquia de Zumarraga.
La primera mención documental sobre el templo es de 1366 cuando, por donación de Enrique de Trastámara, la iglesia fue concedida mediante la fórmula de Juro de heredad a Francisco Gómez de Lazcano, el que era segundo Señor de Lazcano1. Los habitantes de la población se reunían en este edificio, pero no sólo para recibir los sacramentos, sino para realizar las reuniones del concejo, o también para la toma de decisiones importantes.
Portada de Santa María de Zumarraga.
Foto: Ana Peña Fernández.
En realidad no existe documentación específica sobre la fecha de construcción de la ermita, pero varios autores2 han situado algunos elementos arquitectónicos del muro norte en el siglo XII. También se ha comentado la tipología románica de este edificio, incluso se ha señalado que podría ser de transición entre el románico y el gótico. Después de analizar las estructuras y la documentación, he de desestimar estas teorías e incluir a La Antigua dentro del periodo gótico del País Vasco, dada su cronología.
Como se ha señalado, en 1366 Enrique de Trastámara donó la propiedad del templo al Señor de Lazcano, por lo que es evidente que en esa fecha la parroquia ya estaba fundada. Por otra parte, en un documento de 1305, por el que el Rey de Castilla, Fernando IV, intercambió con Beltrán Ibáñez de Guevara, Señor de Oñate, monasterios en Gipuzkoa por hombres y tierras en Álava, esta iglesia no aparece mencionada, y sería lógico que, de haber estado edificada, la hubiera solicitado.3
Teniendo en cuenta lo afirmado, todo lleva a pensar que, razonadamente, esta parroquia fue edificada a principios del siglo XIV. En este sentido, situaremos la cronología de este edificio en pleno período gótico, pero teniendo en cuenta que tanto su estructura como sus formas guardan una conexión clara con los elementos románicos.
La ermita está dedicada a la Visitación de Santa María a su prima Santa Isabel4, es de planta rectangular con ábside trapezoidal, y de una sola nave dividida por seis gruesas columnas de piedra caliza.
El templo tuvo diversas épocas de construcción, dado que existen zonas de sillares de distintas dimensiones. En el exterior del templo, se observa que dos terceras partes están realizadas en sillar, y la última tercera parte, la que corresponde a la zona más alta, está construida en mampuesto. Por eso, se puede suponer que habría una primitiva construcción mucho más baja que la actual, sin el ábside, con un coro más bajo y construida en piedra de sillería.
La fachada principal, situada en el lado sur, tiene varios elementos totalmente góticos. Desde una escalera semicircular de ocho tramos, se accede al interior por una sencilla portada abocinada de arco ojival, constituida por cuatro arquivoltas muy simples apoyadas sobre cuatro columnas con capiteles muy esquemáticos, en medio de las que hay dos aguabenditeras, una a cada lado de la puerta. Lo más destacable en esta portada es la sobriedad de su decoración. La sobriedad y simplificación de las formas llevan a vislumbrar que dicha portada tiene influencia de origen cisterciense, tomada, seguramente, de las iglesias vecinas de Álava y Navarra, construidas durante los siglos XII y XIII. En este muro, y a un lado de la portada, existe una ventana de carácter totalmente gótico. Por otro lado, encima de la misma se sitúan seis piedras salientes que pueden ser los vestigios de un antiguo pórtico.5
Continuando con el exterior, y según la inscripción en letras góticas que se sitúa en el ábside, fue en 1480 cuando se añadió dicho elemento trapezoidal a la construcción. En él se advierte un altorrelieve circunscrito bajo un arco de medio punto compuesto por cinco arquivoltas, donde se representa la crucifixión, esto es, a Cristo Crucificado al cual le acompañan la Virgen y San Juan Evangelista.
Lo más destacable del interior es el carácter rural del mismo, ya que recuerda tanto en la estructura como en la decoración a los caseríos o a la arquitectura rural del País Vasco. Por ello, está claro, que la influencia más notable que se percibe en este templo es la tipología local o rural.
Uno de los elementos más importantes se encuentra en la ornamentación utilizada en la madera. Primeramente, hay que destacar los dos grupos de tres mujeres que aparecen orientados hacia los pies de la iglesia y que van ataviadas con un “sapi”. Dejando a un lado las figuras antropomórficas, existen también en la decoración del techo, y en mayor medida, motivos de carácter geométrico vinculados con los motivos de tradición popular, que encontramos en las famosas kutxas o en las argizaiolas. El coro y las tribunas laterales, finalizadas en 1524, forman un piso de madera elevado, que antes de tener la forma de “U” que hoy en día contemplamos, llegaba hasta la mitad del templo. Su disposición, es la tradicional adoptada por muchas iglesias de la región, sobre todo en la zona de Iparralde durante el siglo XVI.
Interior de la Antigua.
Foto: cedida por el Ayuntamiento de Zumarraga.
En 1729 se añadió al templo la casa de la serora, que posteriormente fue derruida. En una visita realizada por el Obispo en 1746, éste observó un deplorable estado de la ermita, sin duda, porque desde que se construyó el nuevo templo, junto al valle, la antigua parroquia quedó abandonada. Anteriormente, en 1740 el Ayuntamiento había realizado alguna reforma6, pero para el Obispo esos arreglos no fueron suficientes, por lo que ordenó al beneficiado José de Aguirre que se encargase de que la ermita quedara en condiciones. Aguirre encargó estos trabajos al maestro Miguel de Salezán, especificándole que hiciese unas bóvedas de tabla, además de una completa reparación, el Visitador ordenó que se pusiesen nuevas vigas maestras para sujeción del techo, que se retejase y se hiciese cielo raso en el presbiterio.7
Cabe destacar que en 1976, se realizó una profunda reconstrucción del templo, eliminando varios elementos: la casa de la serora y las bóvedas lígneas que cubrían el presbiterio. La nave, en su parte cercana al ábside, se hallaba cubierta, hasta esta reforma, por una cúpula semiesférica de madera y por dos bóvedas de arista en los laterales. Aunque esto se decidió así, hay que recalcar la importancia de estas bóvedas de madera, ejemplo de la arquitectura de madera del siglo XVI que desgraciadamente se ha perdido8.
En el año 1988, y al encontrar insectos xilófagos en la madera se tomaron medidas para contrarrestar el ataque de dichos parásitos, ya que éstos habían atacado la madera de tal manera que se localizaron graves deficiencias en los elementos estructurales. Por ello, se renovó la cubierta, introduciendo un nuevo enlatado y placas onduline bajo la teja.
La Antigua fue declarada Monumento Histórico-Artístico Nacional el 23 de septiembre de 1965, y Monumento Histórico-Artístico Vasco el 27 de julio de 1984. El día 2 de julio, y como acto central de las fiestas patronales, se realiza una muy conocida romería en las cercanías del templo, interpretándose en su interior la tradicional ezpatadantza9 en honor a la Virgen.
Como colofón hay que subrayar que la escultura que acoge este templo también es de gran relevancia, así como otros vestigios del arte sacro de Zumarraga como la iglesia parroquial de Santa María de la Asunción y su retablo. Finalmente, las ermitas de este municipio son un claro ejemplo de la arquitectura rural del País Vasco, debiendo destacar entre ellas la ermita de San Cristóbal.10
1ARAMBURU UGARTEMENDIA, P. J. (2003) Lazkaoko bi jauregietako 21 belaunaldiren apunte historikoak, 1335- 1919, [Lazkao], Lazkaoko Udala. p. 47
2VVAA. (1985) Monumentos nacionales de de Euskadi. Tomo III. Vitoria- Gasteiz, Departamento de Cultura G.V. p. 439; URCOLA ANSOLA, M: (1976) Memoria descriptiva y proceso de restauración del santuario de la antigua Zumarraga. Boletín de la RSVAP XXXII. p. 317.
3PRADA SANTAMARIA, A. (1999) Aspectos de la Historia Eclesiástica de Zumarraga: Los templos de Santa María, Zumarraga, Parroquia de Santa María de la Asunción. pp. 25-28
4Lucas 1, 39-56
5JAKA LEGORBURU, A.C. (1996). La Antigua Santa María de Zumarraga: Catedral de las ermitas, San Sebastián, Kutxa Fundazioa. p. 118.
6Ante la caída de las bóvedas, el regidor y el mayordomo José de Aguirrebengoa mandaron construir un púlpito, un confesionario y bancos. En: A.M.Z. Sección A, Negociado1, Serie I, Libro 2. pág. 206 vuelto.
7A.D.P Leg.C-146/2
8VV.AA (1996), Ars lignea, Zurezko elizak Euskal Herrian. Las iglesias de madera en el País Vasco. Electo. P. 90
9Prada Santamaría, A. (1993). Historia de la Ezpatadantza de Zumarraga, Zumarraga, Ayuntamiento de Zumarraga.
10Más información sobre el arte sacro en Zumarraga en: PEÑA FERNANDEZ, Ana: Arte Sacro en Zumarraga = Zumarragako Arte Sakratua: XIV – XIX. Zumarraga: Ayuntamiento de Zumarraga, 2010.