116 Zenbakia 2001-03-23 / 2001-03-30

Berrikusketak

Nuevos monumentos prehistóricos del País Vasco. Dólmenes de Vizcaya

BARANDIARÁN AIERBE, José Miguel

Berrikusketak: José Miguel Barandiaran Ayerbe José Miguel Barandiarán Ayerbe "Nuevos monumentos prehistóricos del País Vasco. Dólmenes de Vizcaya" Título de la publicación: Revista Internacional de los Estudios Vascos Año de la publicación: 1924 Páginas del artículo: 239 244 Resumen: Estudio de los dólmenes hallados en Gorbea y Oiz. Se describen las losas y su posición así como una descripción del lugar donde se hallaron. E N G O R B EA 1. Austegarmingo arie. El día 22 de Mayo de 1922 exploré parte de aquellas laderas y estribaciones del monte Gorbea que dan frente al valle de Orozko. En aquella expedición me acompañó el culto presbítero D.Juan José de Bastegieta, cura de Olarte de Orozko, a cuya colaboración debo no pocos datos en estos y otros trabajos que he realizado. Pasando por la anteiglesia de Urigoiti, subimos a la loma de Odieta. Después, rodeando por el lado de Oriente las peñas llamadas Astapekatu, Atxulo y Lekanda, subimos a la campa de Araba y de allí a Lekaitz, sitio fresco y apacible donde un caballero vizcaino estaba construyendo una casa o refugio veraniego. Después de comer junto a una fuente que nace en aquel lugar, emprendimos el des censo por el barranco de Iguriano.Visitamos la cueva de Lapurzulo, donde es fama que vivieron doce ladrones con una mujer. Casi al final de nuestra expedición, cuando pasábamos por el collado de Austegarmin, vimos junto al camino una gran lancha de piedra caliza tendida en el suelo, que medía tres metros de largo por uno y medio de ancho y 0, 25 de grueso. La situación de la losa, sus dimensiones y aun la orientación E. W. aproximadamente de su eje mayor, me hicieron pensar se trataba de algún resto de dolmen. Y me confirmé más en mi opinión, cuando uno de los guías me dijo que la losa se apoyaba antes por sus extremos sobre otras piedras menores. Los campesinos la llaman Austegarmingo arie (=la piedra de Austegarmin). Cuéntase que hace veinte años pró ximamente hallaron debajo de ella gran cantidad de dinero:nose sabe quiénes, ni a dónde la llevaron. 2. Araneko arie. Al día siguiente subí al collado que llaman Araneko arie (=la piedra de Arane), donde, según la leyenda, acaeció la trágica muerte de una joven del caserío Arane . Parece que el nombre de este collado alude a alguna piedra notable que debió existir allí en otro tiempo. Yo no ví cosa digna de especial atención, si no son dos piedras, no muy grandes, empotradas en el suelo a modo de mojones, la una frente a la otra. «Mandé hacer una excavación a su lado, y hallé un pedernalito informe y un trozo de cristal de roca, hallazgos que, por su semejanza con objetos que se descubren en nuestros dólmenes, me hicieron pensar que allí existió quizá algún túmulo o sepultura prehistórica. Pero nada puede afirmarse con seguridad» . 3. Dolmen de Pagozareta. El día 6 de junio de este año volví a visitar algunas de las montañas de Orozko. Me acompañó en la excursión el citado D. Juan José de Bastegieta. Pasamos por la falda NE. del monte Odoriaga, no lejos del collado de Austegarmin, y al llegar a la loma llamada Pagozareta, en la ladera meridional del mismo monte, vimos un dolmen, rodeado y hasta cubierto de espesísimo brezal.Se halla a S.SW.de la cumbre de Odoriaga, a W. NW. de la cruz de Gorbea y a SE.de Araneko ari. El terreno que ocupa, pertenece a la jurisdicción de Orozko;pero se halla a 120 metros el mojón que marca los confines de Vizcaya y del valle de Zuya. Fig.I.ª Dolmen de Pagozareta El dolmen está constituído por cuatro losas areniscas, dispuestas del modo que muestra la figura l.ª, las cuales forman una cámara que mide 1, 90 m.de largo, 0, 80 de ancho y 1, 06 de alto. Están rodea das y aprisionadas por la tierra, de suerte que apenas sobresalen un palmo sobre la superficie del suelo. La piedra de la cubierta fué quitada de su sitio hace cuarenta años, según dicen los aldeanos, y hoy se halla a pocos metros del dolmen. Alguien ha trabajado por redondearla para utilizarla después como afiladera giratoria;pero ha dejado sin terminar la.labor. Falta el galgal;lo cual, junto con la circunstancia de hallarse muy hundidas en la tierra las losas laterales, hace que sea sumamente difícil divisar el monumento, si no se acerca a él casi hasta tocarlo con los pies. 4. Dolmen de Usengatzu. Obtenidos los datos más necesarios del dolmen de Pagozareta, partimos en dirección a Araneko ari, rodeando la ladera meridional del monte Odoriaga. Al llegar a la loma de Usengatzu, vimos restos de otro dolmen, los cuales están situados a SW. de la cumbre de Odoriaga y a NW. de Pagozareta. A unos 60 m.a S. SW. se halla un mojón divisorio de los terrenos de Orozko y del valle de Zuya. Fig.2.ª Dolmen de Usengatzu De la disposición de las losas areniscas que quedan de este monu mento puede dar una idea la figura 2ª. No pudimos apreciar todas las dimensiones de estas losas por hallarse empotradas en el suelo. *** En Pagozareta y en Usengatzu se repite la leyenda de tesoros extraídos que he referido de Austegarmingo ari.Por eso los aldeanos, al hablar del dolmen de Pagozareta, dicen: dirua ataraneiko eskinia (=cantón de donde se extrajo dinero). 5. Dolmen de Arimekorta. En las estribaciones orientales del Gorbea, en la pequeña meseta de Arimekorta, dominando a Zeanuri y dominado por la peña de Altamira, existe también un dolmen, cuyo estudio ha sido hecho por los Sres. D. Enrique de Eguren y D. José M.ªde Rotaetxe, aunque no ha sido publicado todavía que yo sepa. EN OIZ El día 8 de junio realicé otra excursión al monte Oiz. Saliendo de Ziortza (Zenaruza) muy de mañana, recorrí antes de mediodía los términos de Kutxinobaso, Markola y el monte Apatiola hasta el collado de Muniuzguren. Me acompañaron los señores don Miguel de Egurola, cura de Ziortza, D. Domingo de Ugartetxea, coadjutor de Bolibar y D. Marcelino de Zenaruzabeitia, vecino de Ziortza, a cuyos servicios debo en gran parte el haber realizado con fruto aquella excursión. Me refirió el Sr.Ugartetxea que en Kutxinobaso, donde actualmente,existe un manzanal, fueron halla dos un brazalete y dos hachas de bronce.De una de las hachas y del brazalete, que, sin duda, fueron enviados a Madrid, se dice en un informe redactado por D. José Ramón Mélida que «el ejemplar (el hacha) se encuentra mal conservado», roto en dos pedazos que ajustan mal, e incompleto; que «pertenece al tipo del hacha de esco taduras para las espigas del mango y con dos asas para afianzar las ligaduras con que al mismo se sujetaban, y que «de dichas asas no conserva más que los arranques». Del brazalete dice que «el trozo que más que una asa parece de brazalete, es del tipo torques por estar formado el objeto con vástago retorcido en espiral» . 6. Dolmen de Iturzurigaña. A la tarde subimos a las cumbres de Oiz. En el alto de Iturzurigaña que está a S. SE. de la cruz de Oiz y a unos 150 m.a S.SE.de la fuente Iturzuri, hallamos un dol men cuyo túmulo mide 5, 50 m.en el diámetro de la base y 0, 40 de altura. En el centro asoman dos losas areniscas orientadas en la dirección E. W. 7. Dolmen (?)de Probazelaiburua. A 200 metros próximamente a N. NE. del anterior, y a SE. de la cruz de Oiz existe un túmulo de un metro de altura y treinta de circunferencia.En el centro tiene un hoyo en forma de embudo, señal cierta de aber sido excavado y profanado, por lo menos tanto como los anteriores. Las piedras que lo forman son de arenisca, de cuya naturaleza es también la roca del subsuelo. No aparecen las losas de la cámara sepulcral, por lo que se puede dar por seguro que han sido extraídas de su sitio y llevadas a otra parte, cosa que ha ocurrido en varios dólmenes de nuestro país. *** Después subimos por la loma de Axnabarburu al pico más alto de Oiz .Nos asomamos a su ladera oriental, y contemplamos un instante el cuadro tan lleno de contrastes que ofrecían aquel accidentado suelo de Vizcaya, aquellos encrespados montes de Guipúzcoa y el dilatado Océano donde se perdía la vista. En aquel mo mento pasaba a nuestros pies una neblina, en la cuallos últimos destellos del sol que ya se ponía, formaban tres arcoiris concéntri cos. Mas luego se disipó la nube, y desapareció el curioso fenómeno. Descendimos al prado de Kortaun y de allí a Ziortza, en cuya casa cura me hospedé, gracias a la amabilidad de mi buen amigo D Miguel de Egurola, quien, conocedor, como pocos, de su pueblo, me proporcionó, además, valiosos datos etnográficos que muy de veras le agradezco. *** El día 9, de regreso de mi excursión, pasé por Iruzubieta, barrio poco distante de Markina. Allí, junto al molino que llaman de Aretxabala, a la izquierda de la carretera que va a Beriz y también del río que pasa por aquel lugar, ví una pared antigua donde hace poco tiempo fueron halladas monedas romanas. Al otro lado del río, en una cantera que da frente al molino, aparecieron antes (hará de esto más de diez años) unas catorce hachas de bronce. Se sabe que una de éstas fué donada al museo de San Sebastián, otra a D. Resurrección M.ª de Azkue, otra a D. Manuel Murga, otra a D. Alejandro Gaitán de Ayala y otra a la Comisión de Monumentos de Vizcaya. También el citado D. Domingo de Ugartetxea, a quien debo estas noticias, posee tres ejemplares muy bien conservados. Son semejantes al del n.º 794 del Musée préhis torique de Mortillet (París, 1903); pero sin rebordes, completamente planos, propios de la primera edad de los metales. Ya en 1917, después de citar la frase de Menéndez y Pelayo: «parece que Vizcaya y Guipúzcoa quedan hasta ahora fuera de la región dolménica» , dije estas palabras:«de hoy más podemos asegurar que dichas provincias se hallan también dentro de la región dólmenica» , pues hacía poco más de un año descubrí los primeros dólmenes de Guipúzcoa;por lo cual, si bien no se conocía entonces ningún monumento de esta clase en Vizcaya, supuse «que la gran faja de necrópolis prehistóricas que empieza en Aralar y continúa en Achu, Alzania y Aizgorri» entraría en esta provincia . Ahora esta suposición ha llegado a ser una realidad. Seminariode Vitoria, 16 de diciembre de 1923. JOSE MIGUEL DE BARANDIARAN (I) Eusko Folklore, 1923, pág.3. (2) Ibid., pág.4. (3) Bol.de la Comisión de Monumentos de Vizcaya. Febrero Marzo de 1914, pág.II. (4) Historia de los Heterodoxos Españoles, tom.I, pág.132.Madrid, 1911. (5) Discurso leído en la solemne apertura del curso académico de 1917 a 1918 en el Seminario Conciliar de Vitoria, pág. 14. Vitoria 1917. (6) Ibid, pág.15. Euskonews & Media 116.zbk (2001 / 3 / 23 30) Eusko Ikaskuntzaren Web Orria