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Actualización de los sistemas de estampa aplicados a papeles pintados panorámicos de primer tercio del siglo XIX

Alfredo GIL LARRINAGA

Los papeles pintados panorámicos del siglo diecinueve, muestran iconografías de escenas mitológicas, cotidianas y paisajes a lo largo de las cuatro paredes que componen una estancia. Un repertorio amplio sacado de modelos orientales, donde encontramos referencias con China.

Los papeles chinos, inicialmente pintados a mano en su totalidad con gouache, eran realzados con tinta china sobre grandes hojas. Posteriormente, el diseño era estampado con planchas de madera talladas en relieve a las que se aplicaba color a mano por pequeños maestros locales, que recreaban paisajes armoniosos más adaptados al gusto europeo.

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En un primer tiempo, fueron los chinos los que sufrieron la influencia europea, y se subordinaron a las exigencias de espacio y de dimensiones occidentales. Los ingleses hicieron venir a Londres a chinos que, bajo su dirección, realizaron imitaciones de papeles originales al gusto nacional.

Las casas inglesas y escocesas, los palacios alemanes y piamonteses se cubren con estos ensamblajes. En Francia la manufactura de papeles pintados fue más tardía pero superó con sus panorámicas a los papeles pintados ingleses seriados.

El proceso que seguían consistía en reinterpretar las imágenes tradicionales o bien en diseñar imágenes ex-profeso para un nuevo formato: el muro. Un artista creador realizaba la maqueta y un artista industrial la adaptaba a las dimensiones de la pared (3 ó 4 metros de altura) y de las características arquitectónicas de las estancias de la época. Los vanos de puertas y ventanas con diferente distribución en función de las distintas casas o torres, condicionaban su colocación. Por lo que nos encontramos secuencias de un mismo motivo a caballo entre un muro y otro; o bien, con las escenas enmarcadas simulando cuadros. Ejemplos que podemos contemplar en las panorámicas “Cacerías en Compiegne” ubicadas tanto en la Casa Gastañaduy de Eskoriatza, Gipuzkoa; como en la Torre Varona, en Villanañe, Alava.

Por otra parte, los sistemas de estampa, han convivido a lo largo del tiempo evolucionando y adaptándose a los nuevos materiales y necesidades técnicas y expresivas. Esto plantea una revisión aséptica de los mismos que permita diferenciarlos.

Sus características cronológicas, materiales y físicas nos ayudan a comprender cuales son sus diferencias. Así hablamos de sistemas de impresión en relieve, en hueco, en plano, permeables y digitales con sus respectivas variables.

Actualizacion de los sistemas de estampa aplicados a papeles pintados panorámicos de primer tercio del siglo XIX

“Los sistemas de estampa, han convivido a lo largo del tiempo evolucionando y adaptándose a los nuevos materiales y necesidades técnicas y expresivas”.

La manera clásica de nombrarlos nos lleva ha indicar la -grafía según el soporte y hablamos de xilografía, calcografía, litografía, fotografía, serigrafía, electrografía, impresión digital y también las diferentes combinaciones entre ellos. A nivel expresivo la diferencia consiste en el número de valores tonales que permiten (re)producir cada sistema, aumentando a medida que evolucionan.

La manufactura de panorámicas fue tradicionalmente impresa mediante procedimientos xilográficos. La característica física de la forma impresora es el relieve: el dibujo se encuentra en la parte superior del taco de madera. Durante el primer tercio del siglo diecinueve se sigue utilizando y se aplica al papel pintado panorámico. Convive con la calcografía, la litografía y ve nacer a la fotografía y a la revolución industrial, de la cual participa.

Junto con la forma impresora hay otros dos elementos fundamentales que intervienen en la impresión de panorámicas: el soporte y la tinta. Por un lado el papel se utilizaba como soporte y se fabricaba en hojas sueltas que a veces eran encoladas para formar un rollo; y por otro, la tinta que se utilizaba para imprimir era un temple de cola. La combinación de estos tres elementos permitía representar, copiar y reproducir escenas que, en la mayoría de los casos requerían de varios colores que se superponían. Esto implicaba la necesidad de tantas formas impresoras como número de colores, pudiéndose llegar a utilizar hasta 3500 tacos de madera y 90 colores, en xilografía, para una misma panorámica.

Actualizacion de los sistemas de estampa aplicados a papeles pintados panorámicos de primer tercio del siglo XIX

“Junto con la forma impresora hay otros dos elementos fundamentales que intervienen en la impresión de panorámicas: el soporte y la tinta”.

En nuestro trabajo para la actualización de los sistemas de estampación hemos conseguido mantener y mejorar las calidades y cualidades en los acabados mediante la elección de la serigrafía, procedimiento de estampación que tiene su origen en el estarcido. Es un sistema de impresión permeable y el medio que más se aproxima al resultado obtenido en las panorámicas xilográficas del primer tercio del s. XIX. Esta técnica, también, está emparentada por su procedimiento con la impresión al pochoir y es utilizada desde 1970 para los papeles pintados de alta gama.

La primera patente conocida apareció en Inglaterra hacia 1907, no siendo hasta 1930 cuando se produce su apogeo. Entre 1960-70 se consolida y se reserva a los colores planos importantes y numerosos. Permite trabajar por transparencia y obtener una impresión más rápida y precisa. El desarrollo de las emulsiones fotográficas facilita realizar calcos y descartes de color por procedimientos fotomecánicos, que reproducen cada uno de los colores que intervienen en los elementos del diseño.

En esta época de los años 60 y 70, tuvo lugar una nueva revolución en el campo de la estampación producida, sobre todo, por la incorporación de sistemas informáticos que se consolidaron a partir de los años 80. Un gran número de empresas recurrió a los talleres especializados para la realización de los clichés o fotolitos, o bien al plotter de cera, procedimientos actualmente en proceso de obsolescencia para el grabado de pantallas.

Actualizacion de los sistemas de estampa aplicados a papeles pintados panorámicos de primer tercio del siglo XIX

“En los años 60 y 70, tuvo lugar una nueva revolución en el campo de la estampación producida, sobre todo, por la incorporación de sistemas informáticos que se consolidaron a partir de los años 80”.

En la actualidad, la herramienta informática nos ha permitido simplificar y mejorar los pasos previos a la estampación. Llegados a este punto, hemos podido comprobar que las calidades de los acabados que nos proporcionan las tintas digitales de los plotters modernos no tienen nada que ver con los acabados xilográficos tradicionales. Por lo tanto, tal y como hemos indicado anteriormente, nos ha sido necesario reafirmarnos en la elección de la serigrafía como procedimiento de impresión por la similitud con los acabados del siglo XIX.

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