Su madre,
Felicidad Echeveste, cuando era soltera fue a trabajar a Madrid,
donde conoció al que se convertiría después
en su marido, el médico Teodoro Peña, con el
que se casó en 1931. El nuevo matrimonio se instaló
en dicha ciudad, en la que el doctor tenía una clínica
y en la que nacerán sus dos hijos, Juan Ramón
y María Teresa, hasta el comienzo de la Guerra Civil
en 1936.
Al comenzar
el conflicto bélico, la familia Peña Echeveste
se trasladó a la casa de los abuelos paternos en Montalvo
(Cuenca) y durante el mismo el padre de Teresa ejerció
la medicina en esta provincia. Finalizada la Guerra Civil,
Teodoro Peña no pudo desempeñar su profesión
en Cuenca y optó por trasladarse a San Sebastián,
donde vivían las hermanas de su mujer, Luisa y Ermendina
Echeveste.
En 1940,
gracias a su titulación, puedo solicitar una plaza
de médico titular o de asistencia pública domiciliaria,
término que se utilizaba entonces, con la intención
de que dicha vacante estuviera lo más cercana posible
a la capital donostiarra, aunque, por un error en la solicitud,
se le concedió la de Oña en vez de la de Oñate.
Teodoro Peña residió en esta localidad burgalesa
hasta que murió en 1958, ocupándose de la salud
del pueblo y de la de los integrantes de la Compañía
de Jesús, que tenía allí un Colegio Máximo
o Universidad Jesuítica.
En Oña
no había posibilidad de realizar más estudios
que los primarios y ésta será la razón
por la que Teresa y su hermano, Juan Ramón, se trasladaron
a San Sebastián a casa de sus tías para cursar
el Bachillerato, mientras que las vacaciones las pasaban con
sus padres en Oña.
Desde los
cuatro años Teresa tenía muy clara su vocación
de pintora, pero su padre le impuso que al menos, hiciera
el Bachillerato, que cursó en la Institución
Teresiana del Paseo de Francia de San Sebastián. Con
trece años, alternando con el Bachiller, comenzó
su aprendizaje artístico con José Camps y, en
sus horas libres, acudía a la Escuela donostiarra de
Artes y Oficios para completar su formación.
Al finalizar
el Bachillerato en 1953, Teresa abandonó San Sebastián
y se trasladó a Madrid con el fin de preparar el ingreso
en la Escuela Superior de Bellas Artes de San Fernando. Para
acceder a dicho centro era necesario aprobar un difícil
exámen que consistía en la realización
de un dibujo sobre estatua clásica. Para superar esta
prueba acudió a las clases que impartía Eduardo
Peña en su afamada academia de la calle Arenal de Madrid,
que actualmente mantiene en funcionamiento su sucesor .
En 1954 ingresó
en la Escuela Superior de Bellas Artes de San Fernando en
la que obtuvo en Preparatorio los Premios del Estado en Pintura,
Escultura y Dibujo, consiguiendo en 1956, 1957 y 1958 los
Primeros Premios de Pintura. Al finalizar sus estudios en
1959 logró el Premio Nacional Fin de Carrera, así
como la "Medalla de Honor" que la Escuela Superior de Bellas
Artes de San Fernando concede cada ocho años al mejor
expediente. Además, mientras estudiaba en San Fernando,
acudía también a dibujar al Círculo de
Bellas Artes de Madrid.
Al terminar
la carrera trabajó en un estudio de la calle Hortaleza
y además, para completar su formación, asistió
en San Fernando a cursos de Pintura Mural, Técnica
del Fresco y Restauración.
En 1965 realizó
su primera exposición individual en la Galería
"Quixote" de Madrid y ganó por oposición el
Premio Roma que se convocaba cada cinco años
Es la primera mujer que obtiene este galardón. En Roma
permaneció cuatro años y en las vacaciones estivales
realizó diversos estudios de grabado y modelado en
otras ciudades italianas y en otros paises europeos, en 1966
en Bélgica y Holanda y en 1967 en Francia y Alemania.
En Madrid
en 1967 representa a España con otros ganadores del
Premio Roma en la exposición de pintura figurativa
que recorre Estados Unidos y otros países. Regresa
a España en 1968 y un año más tarde obtiene
el Segundo Premio en el Concurso Nacional de Pintura y es
invitada a participar en la exposición internacional
de la UNESCO.
A partir
de 1969 su familia se traslada a vivir a Bilbao, por lo que
Teresa alquila un estudio en esta ciudad, que alterna con
el que tiene en Madrid. En 1971 expone por primera vez en
la capital bilbaína en la Galería Illescas y
fue en esta exposición donde el entonces director del
Museo de Bellas Artes de Bilbao, Crisanto Lasterra, adquiere
para dicho museo el cuadro "Salmo 88-87". Posteriormente viaja
a la vez que pinta y expone en distintas ciudades españolas,
como Barcelona y Madrid o en la localidad italiana de Carpi.
En 1977 expone
nuevamente en Bilbao en la Galería "Decar". Se suceden
las muestras importantes tanto individuales como colectivas,
Roma, Zaragoza, San Sebastián, Palma de Mallorca, Vitoria,
Madrid, etc. siendo también muy importante su obra
muralista que tiene una gran expresividad y riqueza plástica.
Su pintura
es de un dibujo preciso, de bellos y difíciles escorzos.
Rostros anónimos formados por pequeños planos
que sugieren volúmenes. Es constante su preocupación
por los seres humildes, por los que sufren y que tienden su
mano en busca de ayuda así dice Teresa: "mi obra
es un canto al misterio del dolor humano...con la potencia
de los recursos plásticos intento un mensaje de amor,
paz y esperanza". Su interés por lo religioso ha
dado como fruto sus mejores obras, obras de gran formato,
llenas de simbolismo en las que destacan los azules como un
himno de esperanza entre fuertes y evidentes espacios negros
y blancos. En sus paisajes apreciamos su dominio del color,
los almendros en flor, los campos de amapolas, la magia de
los ocres y sienas del Otoño del Valle de Mena.
La obra de
María Teresa Peña se encuentra representada
en Museos, Instituciones y Colecciones Particulares:
Museo de
Arte Contemporáneo de Madrid, Museo de Bellas Artes
de Bilbao, en San Sebastián en el Museo de San Telmo
y en el Museo Diocesano, Museo Rodríguez Acosta de
Granada, Museo Contemporáneo de Toledo, Museo del Grabado
en Italia, etc. etc.
En las colecciones
de los Ministerios de Asuntos Exteriores e Información
y Turismo, Palacio del Deporte en Bilbao, Escuela Central
de Bellas Artes de Madrid, Edificio del diario Pueblo en Madrid,
Colegiata de Villagarcía de Campo en Valladolid, Catedral
del Buen Pastor de San Sebastián, Liceo Español
en Roma, etc.etc....
En la actualidad
vive y pinta en su casa-estudio de Entrambasaguas de Mena,
(en el Valle de Mena, Burgos) donde tiene exposición
permanente de su obra. Sus intereses personales van encaminados
principalmente a la investigación y a la superación
lo que logra con un constante trabajo, aunque vive alejada
de toda propaganda y publicidad, lo que hace que sea menos
conocida de lo que merece.