Danza tradicional sobre el escenario
* Traducción al español del original en euskera
Oier Araolaza

Las danzas populares han sido con gran frecuencia modelos de inspiración para las manifestaciones cultas de música y danza. A su vez, los nuevos modelos de danza y las últimas modas, se van filtrando hacia las manifestaciones populares, dando así lugar a una continua interacción entre los bailes populares y los espectáculos de danza.

Actuación del ballet de Juan Antonio Urbeltz con la obra "Kondharian".

Varios autores han abordado el fenómeno de interacción entre los modelos de danza de las élites y los bailes populares, y ejemplos como el de la presencia de pasos de bailes vascos en los ballets que el rey Luis XIV de Francia impulsó en el siglo XVII han sido citados con profusión. En este sentido, resulta significativo el trabajo comparativo que ha realizado Juan Antonio Urbeltz con obras de autores clásicos de la danza y la obra de Iztueta (URBELTZ NAVARRO, Juan Antonio, Bailar el caos. La danza de la osa y el soldado cojo, Pamiela, Pamplona, 1994). Más recientemente Carlos Sanchez Equiza ha analizado la influencia que tuvo la Ilustración en la danza tradicional vasca y, más concretamente, en la obra de Iztueta (SANCHEZ EQUIZA, Carlos, Del danbolín al silbo. Txistu, tamboril y danza vasca en la época de la Ilustración, Pamplona, 1999).

En los años 20 y 30 del siglo XX, un grupo de intelectuales vascos llevó a los escenarios teatrales espectáculos basados en las danzas tradicionales vascas. Así, en la ópera "Amaya" de Jesús Guridi, estrenada en 1920, se interpretaba la coreografía de una ezpata-dantza inspirada en la imagen de los vascos del siglo VIII que concibiera Navarro Villoslada. Arana Martija apunta que los ballets rusos que durante la década de los 20 actuaron en Europa y Euskal Herria tuvieron una enorme repercusión en la escenificación de los espectáculos basados en las danzas vascas. Entre los pioneros de este movimiento destaca Segundo Olaeta, que en 1927 fundó en Gernika Elai Alai un grupo compuesto por niños y jóvenes de Gernika.

Saski-Naski, 1928En 1928 se presentó en Donostia Saski-Naski. Una agrupación formada por coro, orquesta y dantzaris, constituida para poner en escena el folclore vasco. Los dantzaris de Atharratze, Berriz, Izpura y Donostia escenificaron danzas tradicionales vascas. Bailaron como se bailaba en sus respectivos pueblos, pero incluyendo pequeñas adaptaciones realizadas de cara al escenario teatral y dando paso a nuevas creaciones. En Saski-Naski se representaban estampas como Sagardotegian, Iruleak o Kaxarranka. Tras haber sido representada en los teatros Victoria Eugenia y Príncipe de Donostia, así como en el Teatro Municipal de Bayona, el 8 de febrero de 1929 Saski-Naski llegó a los Champs Elysées de París para mostrar una función de danzas y músicas vascas que fue seguida por 2.000 espectadores. Hasta la llegada de la guerra, los escenarios vascos vivieron una agitada dinámica con espectáculos basados en el folclore vasco entre los que se puede destacar el grupo Oldargi que se creó en Bilbao en 1930.

Durante la Guerra Civil española, una de las avanzadillas de la delegación cultural del Gobierno Vasco en el exilio fue el grupo de coros y danzas Eresoinka, que entre 1937 y 1939 actuó en París, Bruselas, La Haya, Amsterdam, Rotterdam y Londres entre otros. Eresoinka presentaba una función que incluía danzas tradicionales de Bizkaia, Gipuzkoa, Navarra y Zuberoa, y coreografías y estampas como Kaxarranka, Sirimiri o Aker-landa.

Estos espectáculos basados en las danzas tradicionales y adaptados para los escenarios teatrales influyeron en algunos casos en las propias danzas tradicionales que las inspiraron. Varias de las danzas que se prepararon para Saski-Naski fueron posteriormente incorporándose a los repertorios de los grupos de danza tradicional. Es así que con algunas danzas podemos realizar el trayecto de ida y vuelta. La sagar-dantza de Arizkun sirvió de inspiración para los creadores de Saski-Naski que coreografiaron una nueva sagar-dantza basándose en esa danza del Baztan. Grupos de danza de toda Euskal Herria han incorporado a su repertorio esta danza reformada para los escenarios y al cabo de 70 años, se encuentra totalmente arraigada en los programas de danzas tradicionales vascas

Uno de los más destacados esfuerzos para escenificar danzas vascas en las salas de teatro se fraguó en la segunda mitad del siglo XX gracias al grano sembrado por Segundo Olaeta en Lapurdi. Así, en 1954 se estrenó en los Champs Élysées de París "Etorki Dantza eta Kantu Batasuna", de Philippe Oihanburu, una función de danzas, canciones y costumbres vascas que el grupo Etorki representó durante tres décadas en 30 países. La agrupación Etorki, fue en cierto modo heredera de las escenificaciones de los años previos a la guerra, y en este sentido representaba cuadros y estampas costumbristas, aunque con una puesta en escena más dinámica y encuadradas en un programa que incluía propuestas de estética más contemporáneas. Etorki fue precursora en el intento de abrir brecha en las herméticas divisiones de género de la danza tradicional, e incluyo bailarinas en danzas guipuzcoanas que tradicionalmente se reservaban a los hombres. Junto a composiciones basadas en las mascaradas, el carnaval y el zortziko de Lantz, Oihanburu retomó la representación del Akelarre, que ya utilizara en su momento Eresoinka.

El grupo Etorki durante una actuación en París (Cortesía Markina Markulegui). Enciclopedia Auñamendi.

El flujo entre el escenario teatral y la plaza ha tenido continuidad, y en el último cuarto del siglo XX, varias recreaciones realizadas por Juan Antonio Urbeltz para los programas del grupo Argia han recalado en los grupos de danza tradicional. Por ejemplo, la danza de mujeres que coreografió Juan Antonio Urbeltz partiendo de una melodía recogida en el pueblo navarro de Jaurrieta a la que aplicó pasos de las mutil-dantzas baztanesas ha conocido una enorme difusión y actualmente es interpretada por cientos de grupos de danza vasca, e incluso se baila en la propia localidad de Jaurrieta. Semejante camino parece llevar la contradanza que ha coreografiado Urbeltz sobre una melodía compuesta por Marian Arregi y que incluyó en el programa de danzas de Baja Navarra.

Durante los últimos años se vienen organizando en Europa diversos eventos de música étnica, folk y culturas del mundo, y se han multiplicados los festivales internacionales de folclore. El festival de folclore más veterano de Euskal Herria, el de Portugalete, acaba de celebrar su 25 aniversario, alcanzando en su madures sus mayores cotas de difusión. En la edición del año 2001 ha contado con 10 grupos folclóricos que han mostrado sus danzas tradicionales en 50 localidades vascas. En la mayoría de estas compañías, se hace notar la mano del coreógrafo más allá de la mera puesta en escena del folclore, aunque se intenta transmitir una imagen impoluta de las canciones, costumbres, vestimentas y danzas tradicionales.

Menos numerosas son las compañías que mostrando una clara intención de renovación abordan la revisión de las danzas tradicionales con una concepción contemporánea del espectáculo. Entre estas se incluyen algunas que convertidas en enormes espectáculos realizan giras mundiales, como es el caso de Riverdance, un inmenso espectáculo que presenta danzas de distintos puntos del planeta ajustándose al modelo de superproducción estadounidense. En su gira mundial del año 2001, Riverdance pasó por Madrid, pero el fortuito incendio que se produjo en el polideportivo en el que la función iba a tener lugar obligó a cancelar la representación.

Otra magna producción de proporciones similares a las de Riverdance es la función del bailarín Michael Flatley Lord of the Dance, que aprovecha el auge mediático de los sonidos musicales de Irlanda. En lo que a España respecta, el espectáculo Ibérica presenta danzas de distintas regiones bajo una estética contemporánea.

Tendencias actuales en Euskal Herria
Una ojeada a las representaciones que durante los últimos 4-5 años han tenido lugar en Euskal Herria, parece indicarnos que el trabajo de creación goza de mayor libertad que durante la década de los 80, y que las instituciones públicas, programadores culturales y medios de comunicación muestran interés en promocionar las propuestas que partiendo de la tradición muestran una clara intención de renovarla.

Actuación del ballet de Juan Antonio Urbeltz con la obra "Kondharian".

Entre los nuevos espectáculos se pueden reconocer dos modelos. Uno de los modelos lo constituye la prolongación en el tiempo de la corriente inaugurada por Saski-Naski, que conoció su esplendor con grupos como Eresoinka o Etorki, y que sigue teniendo continuidad en varios grupos de danza actuales. A partir de esos grupos han surgido conjuntos que tratan de realizar espectáculos de corte innovadores. Partiendo de una percepción costumbrista de las tradiciones populares recrean tópicas escenas de la imaginería vasca a través de una forma de bailar estilizada, y tratan de incorporar al espectáculo elementos de aspecto moderno. Se trata de un modelo muy prolífico respecto al número de producciones. Por citar sólo las funciones más significativas, incluiríamos en este modelo el espectáculo Sutargi, de la compañía Aukeran, o Upeletan Erronka, del grupo Laxok.

El segundo modelo es resultado de la evolución del grupo de danza Argia y de su director Juan Antonio Urbeltz. Las nuevas propuestas y puestas en escena que realiza Urbeltz son resultado de las interpretaciones que extrae a partir de la investigación sobre el patrimonio folclórico y la danza tradicional. Respetando el carácter tradicional en el estilo de la danza, trata de encontrar la lógica interna de la danza tradicional y aborda la empresa de completar el repertorio respetando sus propias reglas. Identificar y aplicar esa lógica exige un conocimiento exhaustivo del repertorio de movimientos y coreografías de las danzas tradicionales vascas y de Europa, resultado de años de estudio y documentación. Por ello, es muy difícil que los grupos conducidos por jóvenes dantzaris puedan aplicar este modelo. Además del propio Juan Antonio Urbeltz y su grupo Argia, sólo lo ha hecho Claude Iruretagoiena a través de la compañía Maritzuli en el espectáculo Ingura Mingura.

Una de las características comunes de los nuevos espectáculos es la tendencia a reducir el cuerpo de baile. En contra de lo que ha sido habitual en este tipo de espectáculos, las formaciones se están reduciendo, fundamentalmente en lo que se refiere al número de bailarines, ya que el resto del personal se ha visto reforzado y es cada vez más habitual contar con el personal básico que requiere una puesta en escena como músicos, directores de escena, técnicos de luz y sonido, o encargados de vestuario y atrezzo.

Grupo Aukeran. Fotografías: Jose I. Hernandez. www.aukeran.com

Los espectáculos estrenados durante el último lustro muestran una clara tendencia a trabajar en grupos reducidos. De hecho, en el grupo Aukeran no bailan más que 7 personas, y en Laxok 4. En la última representación de Juan Antonio Urbeltz, Kondharian, actúa un grupo formado por cerca de 40 bailarines, pero en las anteriores funciones dirigidas por Urbeltz bailaban cerca 150 dantzaris, y la compañía Maritzuli ha representado Ingura Mingura con 50 bailarines, menos que los que participaron en Ixtorio Mixtorio.

La reducción del número de bailarines tiene consecuencias en varios aspectos del espectáculo. Por de pronto, en el espectáculo sólo participan los dantzaris de mejor preparados, lo que mejora la calidad de la función en su conjunto. Los dantzaris deben asumir una mayor responsabilidad, pero el ritmo de preparación se acelera, ya que en los grupos numerosos el ritmo lo marca el "mas lento". Por otro lado, la reducción del tamaño de los grupos, se encuentra estrechamente ligado al tamaño de las salas que acogen los espectáculos. Los espectáculos de formato más reducido permiten su distribución en auditorios y teatros de tamaño medio.


Oier Araolaza, dantzari y antropólogo

Euskonews & Media 159.zbk (2002 / 3 / 15-22)


Dohaneko harpidetza | Suscripción gratuita | Abonnement gratuit |
Free subscription


Aurreko Aleak | Números anteriores | Numéros Précedents |
Previous issues


Kredituak | Créditos | Crédits | Credits

Eusko Ikaskuntzaren Web Orria

webmaster@euskonews.com

Copyright © Eusko Ikaskuntza
All rights reserved