Faceta
folklorista y musical de Resurrección María de Azcue |
Mercedes
García Pérez |
Resurrección
María de Azkue nació el cinco de agosto de mil ochocientos
sesenta y cuatro en Lekeitio (1).
Hijo de Eusebio María de los Dolores Azkue,
conocido por su producción poética vasca y profesor
de náutica en la Escuela de Bermeo, casado en segundas
nupcias con María del Carmen Aberasturi Uribarri Matategui
Ulezaga (2).
Desde el comienzo
de su adolescencia se sintió profundamente atraído
por la vocación eclesiástica, la filología
y la música, ya que en casa de Azkue se respiraba un gran
ambiente musical, el padre tocaba la flauta y cantaba, como su
hijo mayor Alfonso. Los hermanos mayores de Resurrección
estudiaron solfeo y piano con el durangués Juan María
Blas de Altuna que había conseguido instalar allí
el primer órgano Cavaille-Col del País Vasco en
1861.
Terminado el Bachillerato
en Bilbao, ingresa en septiembre de 1881 (a los 17 años)
en el Seminario Conciliar de San Prudencio y San Ignacio de Loyola
de la diócesis de Vitoria. Azkue cursó los estudios
normales, durante 4 años como interno, tras su etapa en
el Seminario Diocesano de Vitoria-Gasteiz, prosigue sus estudios
como colegial interno (de 1885 a 1888) en el
Seminario Conciliar Central de San Carlos de Borromeo, Salamanca,
donde combina sus estudios con los trabajos de becario
como segundo organista y cantor (3),
con la labor de catequista de la Asociación de la Doctrina
Cristiana y con su participación activa como congregrante
de la Asociación de San Luis Gonzaga (4).
En
1888 termina la carrera eclesiástica con la calificación
de Meritissimus, y en Agosto de este mismo
año, solicita Azkue el Sagrado Presbiterado y el 26 de
junio de 1893 obtiene, por la facultad de Sagrada Teología
del Seminario Central de Salamanca el Grado de Doctor (5).
Terminada su etapa
de formación eclesiástica, regresa a Bilbao y en
1889 fue nombrado capellán de Rafaela de Ibarra, fundadora
del Instituto Religioso de los Angeles Custodios, ejerciendo esta
capellanía hasta 1904, en que se trasladó a Tours.
Como sacerdote no estuvo incardinado a ninguna parroquia porque
quería centrarse en sus investigaciones sobre la cultura
vasca, su cultura, su música, su lengua, etc.
AZKUE Y LA TRADICIÓN ORAL.
De él diría
el profesor Antonio Tovar:
"Azkue tenía
un sentido muy vivo de la tradición popular. Se acercaba
a ella desde dentro, y por eso puede parecer al especialista
que examina al pueblo en frío y desde fuera, privado
de cierto rigor metódico. No recogía la tradición
vasca como puro documento antropológico o etnográfico,
sino como enamorado intérprete que se sentía él
mismo un eslabón de la cadena que iniciaron los más
remotos antepasados. Ello explica la libertad,
a veces, poco rigurosa con que D. Resurrección maneja
los materiales, justamente porque para él no son colección
de materiales" (6).
Resurrección
María de Azkue siempre estuvo interesado por la cultura
de tradición oral, a la que dedicó grandes esfuerzos
que se plasman en dos magnas obras:
•
El cancionero popular, obra folklórica más
importante y la mejor prueba de la fertilidad musical de Euskalherria.
Es el resultado de toda una vida dedicada a la recopilación
de música de tradición oral. Este
cancionero fue presentado por Azkue al concurso convocado por
las diputaciones vascas en 1912 para premiar las mejores colecciones
de canciones populares vascas (7).
El dictamen fue publicado el 20 de marzo de 1915 donde otorgaba
el primer premio a la colección "Vox Populi" de Azkue,
al que se premió con 5.000 pesetas estando los autores
premiados obligados a dedicar parte del premio a los gastos de
la publicación. Como prólogo incluyó estudios
sobre la música popular y su existencia, una comparación
entre la música popular vasca y la música griega
antigua, y una clasificación del repertorio folklórico
vasco. A la vez que recogía lo que el pueblo cantaba, iba
coleccionando costumbres, poemas populares, juegos, supersticiones,
cuentos...
• Euskalerriaren
Yakintza o Literatura Popular en la cual editó todos
los conocimientos de tradición oral que había ido
adquiriendo en sus salidas, estaba dedicada especialmente a su
madre. La obra consta de 4 tomos articulados de la siguiente manera:
el primero subtitulado Costumbres y Supersticiones, con un total
de 464 páginas y dividido en un prólogo y 19 capítulos.
En el Prólogo Azkue nos explica el título y el origen
de la obra:
" El haber denominado
la obra Euskalerriaren Yakintza obedece a dos causas:
Iª A que la otra denominación, Folklore, estaba
ya ocupada. 2ª A que me satisface la antes citada denominación
más que esta alienígena. Mi caro amigo, el benemérito
sacerdote Barandiarán, fundó el año 1920,
entre seminaristas de nuestra diócesis, una Sociedad
cuyo objeto era reunir datos como éstos...Sentía
yo una especie de escrúpulo para dar
idéntico nombre, el de Eusko Folklore, a esta
mi labor.... Empecé a inquirir y examinar producciones
extranjeras con objeto de mejor enterarme de esta especialidad
(8)."
El segundo libro,
dedicado a Cuentos y Leyendas, incluye también una clasificación,
un estudio en el que compara los cuentos y leyendas vascos con
las de otros pueblos, junto a una comedia de Hans Sachs (héroe
de la ópera wagneriana Die Meistersinger von Nürnberg);
además de un apartado final de datos curiosos. El tercer
volumen recoge en tres partes los Proverbios, Modismos, Frases
rimadas, Trabalenguas o dichos cacofónicos y la Jergonza
vasca. El cuarto se centra en las oraciones populares, poesía
popular, meteorología y medicina para finalizar la obra
con un apartado dedicado a los juegos y cantos de niños,
con un total de 323 juegos recogidos, de los cuales 134 tienen
música.
AZKUE, MÚSICO.
"He experimentado
un vivísimo placer en leer sus composiciones por las
cuales me apresuro á ofrecerle mis felicitaciones. No
quiero decirle que me han parecido perfectas de todo punto;
Ud. no me tomará mal por mi franqueza, verdad?. Pero
descubren una naturaleza musical muy delicada
y hacen presagiar mucho para el porvenir. Se conoce solo que
tiene que trabajar mucho y también que sería criminal
el no trabajar." Charles Bordes (9).

En el Seminario Conciliar de Salamanca,
donde compuso diferentes obras alternándolo con su labor
como segundo organista y director del coro.
La música
estaba presente en todas las facetas de su vida, lo mismo que
el sacerdocio. No sólo se dedicó a componer, recopilar
música popular, realizar trabajos musicológicos,
sino que se preocupaba de aspectos tan variados dentro del ámbito
musical como pueden ser: la situación del músico
en su época:
"De los organistas
voy á permitirme decir en voz clara (por supuesto con
intención sanísima) lo que todos los músicos
que me escucháis, profesores o aficionados, decís
en la intimidad, cada vez que la oportunidad os brinda á
ello. Tenemos en nuestro país muchísimos más
órganos que organistas. No se puede achacar esto á
que les falte aptitud para el arte: son baskongados y basta.
¿Podrá achacarse á que no es suficiente la educación
artística que reciben en sus casa ó en los centros
á que acuden, por ejemplo Madrid, en cuyo Conservatorio
todo el mundo sobresale y lo verdaderamente notable puede considerarse
con los dedos de una mano. Yo bien sé que de los centros
de enseñanza, llámense estos Seminarios ó
universidades, Academias ó Conservatorios, no salen sabios;
como de los viveros no brotan gigantescos árboles; crecen
en ellos vástagos más ó ménos lozanos
que transplantados y bien nutridos llegan por asimilación
propia á su completo desarrollo. Y á nuestros
organistas (claro que hay excepciones) les falta este ambiente,
estos medios de desenvolvimiento y perfección. Se exige
de ellos que sean artistas y se les trata peor que á
artesanos.
Una prueba bien
reciente y palmaria nos ofreció anoche mismos el telégrafo,
comunicándonos que en un puerto no muy lejano al nuestro
cargadores de los muelles habían rechazado por mezquino
el salario de cinco pesetas al día. ¿Qué organista
tiene de asignación más de dos diarias? Leed las
condiciones de los concursos, cuando los puestos, más
que el mérito no se dan al favor ó á la
intriga, …Más si queremos que nuestros organistas desarrollen
sus facultades artísticas y se dediquen á tocar
el órgano como órgano y lean revistas musicales
y adquieran las piezas de mérito que el genio vaya produciendo,
en una palabra, sigan al arte en sus progresos,
no les retribuyamos con el mezquino sueldo de hace cincuenta,
cien o más años. Tratémosles como deben
ser tratados: como artistas (10)."
Respecto a su formación
musical, Azkue tras las primeras lecciones musicales recibidas
en Lekeitio, fue ampliando su cultura musical en el Seminario
Diocesano de Vitoria y en el Seminario Conciliar de Salamanca,
donde compuso diferentes obras alternándolo con su labor
como segundo organista y director del coro, como becario. Ya en
1897 compuso seis zarzuelas, dos de ellas bilingües: Colonia
Inglesa y Pasa de Chimbos, y cuatro vascas: Vizkaytik
Bizkaira, Eguzkia nora, Aitaren bildur y Sasi-eskola,
destinadas a ser representadas por los alumnos de la escuela vasca
que él fundó en 1897, con una clara orientación
pedagógica: aprender a expresarse y comunicarse mediante
el euskera. Según sus propias palabras
"estas zarzuelas fueron compuestas sin haber
estudiado ni una lección de harmonía y a expensas
de sus amigos, que le obligaron a instruirse en composición
musical" (11).
Su primer maestro fue José Sainz Basabe (12),
Director del Conservatorio de Bilbao. En 1900 con motivo
de la publicación de su Diccionario tiene que trasladarse
a Tours y desde allí asiste en París a clases de
música bajo la dirección de Vincent d´Indy coincidiendo
con José María Usandizaga y Jesús Guridi,
joven del que se hizo cargo durante su estancia en París
por encargo de sus padres. Terminada la edición de su diccionario
se traslada a Bruselas para matricularse en el
Conservatorio Real durante el curso 1906-1907, para ampliar sus
estudios, pero su meta era Colonia, donde llegó el 15 de
septiembre de 1907 para cursar estudios de armonía y contrapunto
(13) con el profesor
Stratesserf. Durante su estancia en Colonia
se instaló primeramente en un Convento sito en el Palacio
de los Alexiander, que abandonó "porque no se han portado
conmigo como debieron y prometieron" (14),
para trasladarse a la casa de un teólogo, muy cerca del
Conservatorio .
Para ingresar en
el Conservatorio se le exigió a Azkue, al no tener ningún
certificado oficial de sus estudios musicales,
que mostrara alguna composición suya, decidiendo presentar:
La cuna vacía y La colección
de melodías populares armonizadas que presentó
junto a una conferencia (15),
ante las cuales el director Steinbach, que era el profesor de
composición y dirección, quedó pasmado
(16), prometiéndole
a Azkue, que en cuanto dominara el idioma y tradujera aquellas
letras, serían presentadas en un concierto público,
ante lo cual Azkue estaba maravillado al enterarse de que en los
conciertos del Conservatorio sólo figuraban nombre como
los de Beethoven, Mozart, Saint-Sans... etc.
En esta
ciudad compuso por petición de su profesor una Sonata
para piano, un Ave María a voces solas al estilo
palestriniano, un Benedictinus a 6 voces, También
compuso un O Jesu, Dir in trene (17),
un oratorio titulado Daniel para solistas, coros y orquesta,
una pieza para el Concurso organizado con motivo de los Juegos
Florales en Colonia, al que se le otorgó el primer premio,
y una pieza titulada Ritter (Caballero) que es una balada
alemana para tenor y piano. Durante su estancia en Colonia, Azkue
iba todos los sábados a la Opera donde conoció y
amó el Drama Wagneriano. Terminados sus estudios
musicales, Azkue no regresó a España sino que se
quedó para asistir a unas clases particulares con el profesor
Steinbach, con el fin de dominar el arte de la orquesta y de participar
en la celebración del Congreso Eucarístico Internacional
(del 8 al 12 de agosto), entonces regresa a Bilbao en agosto de
1909, para pasar sus vacaciones en Lekeitio, su villa natal.
Este mismo año,1909,
compone R.M.A. una Sinfonía Vasca titulada Lamindano,
que a petición de un amigo suyo cambiará el título
y lo denominará Poema Sinfónico, una forma más
en consonancia con lo que en Europa se estaba haciendo. Este mismo
año el director de la Revista Musical, quiere nombrarle
Corresponsal en Viena y Londres, cargo que Azkue acepta.
Azkue
siempre abogó por la recuperación y auge del teatro
lírico vasco o teatro al que él contribuyó
con la composición dos óperas, Ortzuri y Urlo.
En ellas vemos una actualización de las formas y técnicas
musicales que había aprendido en Europa,
actualización que viene emparejada con la revalorización
del material folklórico como base de las composiciones
musicales. De su primera ópera Ortzuri (18),
sólo se estrenó en Bilbao con el título de
Itsasora, el primer acto. Esta ópera fue ruidosamente
aplaudida, si bien a la salida las opiniones se dividieron y se
hicieron apasionados comentarios. Mientras unos impugnaban la
ópera tachándola de pesada y atribuyendo a la música
una monotonía derivada del canto antifonario, otros la
defendían con gran ardor diciendo que era el resultado
feliz de la escuela wagneriana. El 29 de mayo de 1914 se estrenó
su segunda ópera, Urlo, que fue duramente criticada
por ser considerada demasiado germana y supuso la ruina económica
de Azkue (19), que abatido
decidió desaparecer e ingresar en los Jesuitas, pero finalmente
su gran amigo Txomin Aguirre le hizo desistir. Durante toda su
vida el grueso de su producción musical fue religiosa,
dedicada a sus amigos, y en especial a la Virgen María,
a Santa Teresa y a las Dominicas de la Encarnación, fue
miembro habitual de tribunales de concursos de orfeones, participaba
en los Certámenes aportando su granito de arena con sus
estudios de Folklore, y escribió varias biografías
para el Diccionario de Música de la Editorial Labor en
1941. Pero también debemos destacar sus escritos sobre
música tradicional, La Música Popular Baskongada,
pronunciada en el Centro Vasco de Bilbao, el 15 de febrero de
1901; La Música Popular Vasca, Junta de Cultura
Vasca, el 21 de enero y 18 de marzo de 1918; y La Tradición
en nuestra música popular religiosa, Congreso de Música
Sagrada de Vitoria, el 21 de Noviembre de 1928, La Música
Baska, para la obra "Los Baskos en la Nación Argentina"
a petición de José Ramón Uriarte, director
de "La Baskonia", en 1940.
En 1922 forma parte
activa en la organización del V Congreso de Música
Sagrada en Vitoria por petición del Obispo Mateo Múgica,
encargándose de la sección dedicada al "Canto
religioso popular". El 1 de enero de 1936 es invitado por
el propio Higinio Anglés al II Congrés de la Societat
International de Musicología.
CONCLUSIÓN.
R.M.A, fue, es indudable,
una figura de gran importancia en el ámbito cultural vasco
y desarrolló una actividad dirigida no sólo al conocimiento
de la música tradicional, de forma profunda, ahondando
en las diferentes melodías que el pueblo cantaba y bailaba:
en sus melodías, ritmos, acompañamientos...sino
también llevando a efecto en sus composiciones un nuevo
lenguaje musical a partir del folklore vasco. Así encontramos
una dialéctica en la obra de Azkue, entre lo popular y
lo culto; ámbitos que no suponen una contradicción,
sino que fueron fusionados y combinados por Azkue a lo largo de
sus manifestaciones musicales.
De igual modo el
estudio de Azkue nos ha permitido revalorizar su faceta musical
y folklorista, descuidada frente a otras facetas como la de filólogo
o académico, porque a través del estudio de sus
composiciones, sus escritos sobre música y su correspondencia
observamos como Azkue siempre ha reaccionado y sentido ante las
nuevas corrientes estéticas del momento. Nuestro compositor
compuso una gran cantidad de obras musicales, la mayoría
de las cuales, por desgracia, permanecen en el olvido.
Tras el análisis
de su obra, podemos afirmar que Azkue desarrolló en el
ámbito ideológico y en sus composiciones, aunque
de manera más limitada, un lenguaje musical autóctono,
también denominado nacional, oponiéndose al populismo
y al italianismo presente en la música española.
Defendiendo el wagnerianismo y toda su estética, sobre
todo en lo referente al leit-motiv y el concepto de Drama Musical.
Además, abrió una puerta y animó a los compositores
más jóvenes, como Jesús Guridi, a que compusieran
utilizando melodías populares vascas, a través de
las cuales se conseguiría crear una verdadera identidad
musical propia. Mientras que algunos compositores contemporáneos
seguían repitiendo las líneas estéticas italianas,
Azkue siempre procuraba crear un nuevo lenguaje buscando, asimilando
y bebiendo la esencia de la música popular vasca, pero
huyendo de la imitación fácil.
Desde
el punto de vista creativo, su obra no está, ni mucho menos,
aislada de la evolución que muestra la música europea
del momento, sino que absorbe los nuevos lenguajes, especialmente
el wagnerianismo y el nacionalismo. En su creación, con
importantes altibajos, Azkue pretendió recuperar la tradición
de la zarzuela española con la composición de Pasa
de Chimbos o Vizcaytik-Bizkaira .... pero con una orientación
de marcado corte nacionalista, al utilizar el euskera y cuadros
costumbristas como ejes principales. Siempre intentó asumir,
con mayor o menor fortuna, los nuevos elementos compositivos,
intentando crear su propio código musical.
En el campo de la
música tradicional no sólo se limitó a recogerla,
sino que desgranó, estudió y analizó cada
unos de sus elementos por controvertidos que fuesen: la existencia
o no de una música popular vasca, o del ritmo zortziko...
lo que le llevó la mayoría de las veces a entrenamientos
con estudiosos de la música popular vasca.
Finalmente, tratando
de hacer una valoración lo más objetiva posible,
hemos de concluir señalando que Azkue fue un intelectual
y compositor muy relevante en su época y en el ámbito
vasco, recogiendo en su persona las diferentes opciones estéticas
que él fusionó en su obra musical. Hemos visto cómo
el autor de Urlo se encuentra a la cabeza de toda actividad
musical destinada a mejorar las infraestructuras musicales de
nuestro país, ejerciendo una notable influencia en algunas
instituciones y su participación en los proyectos musicales
más destacados que tienen lugar.
La última
conclusión que debemos destacar es que tanto Resurrección
María de Azkue como otros compositores de su generación,
fueron relegados al olvido al estar a caballo entre dos épocas
marcadas por corrientes estéticas muy diferentes, algunas
de ellas muy innovadoras. Pero la historia casi le ha dado la
espalda a su producción musical ante la avalancha de los
llamados músicos nacionalistas más acordes con los
gustos estéticos de la época, los andalucistas,
a pesar de su gran producción musical, practicó
casi todos los géneros, de ser un renombrado folklorista
y de la admiración de eminentes musicólogos como
Felipe Pedrell, Higinio Anglés, el Padre Otaño...,
tras su muerte cayó en el olvido.
(1)
Fue bautizado por Juan Miguel de Eguileor, presbítero
cura coadjutor, en la Parroquia Matriz de Santa María
de Lekeitio "siendo sus padrinos Ramón de Aberasturi,
de Mundaka, y Josefa Ignacia de Azkue, de Zamudio. Siendo
testigos: Juan Cruz de Aramea y otros". Tal como consta en
la Partida de Nacimiento, extraída del Libro de Bautismo,
folio nº 166, el libro no está numerado, se identifica
de la siguiente manera: "comenzado el 31 de Mayo de 1854
y finalizado en 30 de Marzo de 1869". En Dicha partida
consta también su condición de Confirmando,
Archivo del Seminario Diocesano de Vitoria, Libro de Confirmados,
folio 81, vuelto. (VOLVER)
(2) Viuda natural de Mundaka, nacida allí
el 23 de Enero de 1835. El matrimonio fue celebrado en su
pueblo natal el 3 de Junio de 1857, contaba Eusebio con cuarenta
y tres años y tres hijos pequeños de su anterior
matrimonio y María del Carmen con veintidós
años. (VOLVER)
(3) Carta de Azkue al Padre Serapio Mendía
fechada el 6 de Octubre de 1885, Azkue Biblioteka, Bilbao.
(VOLVER)
(4) Expediente del Seminario de Salamanca.
(VOLVER)
(5) Ibidem. (VOLVER)
(6) Tovar, Antonio, Azkue y la tradición
oral, Euskera II, Bilbao, 1957, pág. 53-54. (VOLVER)
(7) La convocatoria se publicó en Euskalerriaren
Alde, Tomo II, pag. 127. (VOLVER)
(8) Ibidem, pág. 11-16. (VOLVER)
(9) Carta de Charles Bordes, París,
7 de Junio de 1897. Azkue Biblioteka, Bilbao. (VOLVER)
(10) La música popular bascongada,
Conferencia dada en los salones de la Sociedad "Centro Vasco",
el 15 de Febrero de 1901 con 14 ejemplos harmonizados, editada
por la Imprenta y litografía de Gregorio Astoreca,
Bilbao, 1901. (VOLVER)
(11) AKESOLO, Lino de,Dos notas autobiográficas
de Azkue , BSRAP, Año XXI, Cuaderno 1º, pág.
37-50. San Sebastián, 1965. (VOLVER)
(12) José Sainz Basabe, nació
en Madrid en 1856 y murió en 1948. Se formó
en el Conservatorio de Madrid (1886) y en el Conservatorio
de Roma (1889). En 1909 compone una serie de obras para órgano
que el padre Nemesio Otaño incluye en su Antología
Moderna Orgánica Española, junto a obras
de Bernardo Gabiola, Jesús Guridi... publicada en 1909.
En 1913 es nombrado Director de la Banda Municipal de Bilbao,
año que estrena la ópera Udala y en 1924 es
nombrado Director del Conservatorio de Música de dicha
villa, cargo que ocuparía hasta su muerte en 1948.
(VOLVER)
(13) En una carta a su sobrina Santa, fechada
el 22 de diciembre de 1906, en Bruselas, le comentaba, que
siempre les hablaba de contrapunto: "¿Pero qué es
eso de contrapunto?, dirán mis chiquitines. Mirad.
A un condiscípulo mío le preguntaron un día:
¿Qué es religión? -No sabía el pobre
que contestar, pero en fin, gracias al soplo de un perillán
contestó muy serio: la Virgen. ¿Conque contrapunto?
Pues, como nadie me sopla, no se si deciros Palestrina o Lazcano:
es la armonía perfeccionada". Eskuskribua 1909-1919,
pág. 83. Azkue Biblioteka, Bilbao. (VOLVER)
(14) Eskuskribua 1909-1919, pág. 106.
Azkue Biblioteka, Bilbao. (VOLVER)
(15) La música popular baskongada,
Bilbao, 1901. (VOLVER)
(16) Palabra que emplea Azkue en la carta
a su sobrina Heilige para mostrar la satisfacción que
ambas obras causaron en el director del Conservatorio de Colonia.
Eskuskribua 1909-1919. pág. 107, Azkue Biblioteka,
Bilbao. (VOLVER)
(17) No se ha localizado su partitura, pero
sabemos de su existencia por una carta de Azkue a la Infanta
Dª Paz de Borbón fechada el 13 de Marzo de 1908:"Ayer
enseñé a mi profesor de composición y
director de Conservatorio, lo que llevo hecho de esta invocación
O Jesu, Dir in trene, me encargó que en cuanto terminase,
le pusiera acompañamiento de orquesta, Confieso que
en esto aun me siento no poco torpe, por lo cual sólo
envié a S.A? acompañamiento a piano con la melodía".
Eskuskribua 1909-1919, pág. 123. Azkue Biblioteka,
Bilbao. (VOLVER)
(18) Aspecto que no agradó mucho a
Azkue, el que sólo se representara el primer acto de
dicha ópera."accedí en cuanto se me presentaron
mis buenos amigos D. Oscar Rochelt y D. Manuel Losada, de
parte de esa Junta. Otra palabra más bastó para
que yo hiciera el sacrificio de acceder a que se diera mutilada
mi Ortzuri." Eskuskribua, pág. 163-164, Azkue Biblioteka,
Bilbao. (VOLVER)
(19) Una ópera con la que perdió
más de 25.000 pesetas. Papeles sueltos, Azkue Biblioteka,
Bilbao. (VOLVER) |
Mercedes García
Pérez, Presidenta de
la sección Folklore de Eusko Ikaskuntza
Fotografías: Enciclopedia Auñamendi y de la colección
Bidegileak nº5 del Gobierno Vasco |