Hacia 1986, el mundo del bertsolarismo
adoptó una decisión especial: la de autocrearse,
dado que al negarse a dejar su futuro en manos de factores externos,
tomó la determinación de fundar la Asociación
de Amigos del Bertsolarismo, un lugar de encuentro que acogiera
a quienes de alguna forma se sienten implicados en el bertsolarismo.
Desde el principio se tenía
bien claro que no se trataba de una asociación de bertsolaris;
de hecho, el mayor peso de la asociación, tanto en cantidad
como en calidad de impulsores, lo han asumido los amigos del
bertsolarismo no bertsolaris. Sin embargo, al principio la sociedad
la interpretó como si de una asociación de bertsolaris
se tratara; incluso su propio nombre inducía al error
(Bertsolari Elkartea-Asociación de Bertsolaris), dado
lo cual, y con el objeto poner fin al desequilibrio entre la
denominación y la realidad, en 1995 su nombre se cambió
por el de Euskal Herriko Bertsozale Elkartea (Asociación
de Amigos del Bertsolarismo de Euskal Herria).
En estos momentos, la Asociación
de Amigos del Bertsolarismo está formada por 1.300 miembros
procedentes de todos los territorios de Euskal Herria, y agrupa
a todos los agentes activos del entorno del bertsolarismo: bertsolaris,
escritores de bertsos, preparadores de temas, jueces, organizadores
y meros aficionados a bertsos. En términos generales,
a los amigos del bertsolarismo que quieren mantener algún
tipo de vinculación con este proyecto, cualquiera que
sea el papel que desempeñan en esta actividad cultural.
La acción creativa del bertsolari
y el bertsolarismo
Dentro de la trayectoria de estos
años hay dos aspectos que diferenciar. Por una parte está
la acción creativa del bertsolaris, la función
artística que desarrollan de plaza en plaza y que tan
sólo atañe a ellos. La Asociación no se
entromete ni en ese plano creativo, ni en aquellos asuntos que
únicamente conciernen al colectivo de los bertsolaris.
Afortunadamente, se trata de una actividad artística económicamente
autorregulada que ni requiere ni anhela subvención especial
alguna y que hace su caminar de una forma bastante natural.
El bertsolarismo, por
otra parte, es el proyecto cultural que se desarrolla en torno
al bertso, entre cuyas funciones destacan las de velar por su
transmisión, estudiar su aportación en la enseñanza,
establecer las vías para su investigación, cultivar
los modos de difusión de esta actividad cultural, coordinar
las escuelas de bertsolaris, determinar la política de
divulgación, profundizar las relaciones internacionales,
etc.
El proyecto cultural del bertsolarismo,
trazado tras 13 años de experiencia y deliberaciones,
está íntegramente asumido por la Asociación
y ha abarcado a toda Euskal Herria, a todas las personas que
deseen implicarse en el bertsolarismo, mirando a largo plazo
y materializándose en el seno de la Asociación.
El resultado y el rector de la Asociación:
el proyecto cultural del bertsolarismo
En el devenir de la Asociación,
el inicial "afán por impulsar el bertsolarismo"
ha ido poco a poco dando lugar a un proyecto más firme
que gira en torno a tres ejes: la transmisión, el análisis
y la difusión. Y una sensibilidad: la territorialidad.
- La transmisión: este aspecto, cuya función es
la de asegurar la transmisión del bertsolarismo a las
nuevas generaciones, engloba por una parte la enseñanza
y por otra las escuelas de bertsolaris. Investiga qué
es lo que el bertsolarismo, y, en un sentido más amplio,
también las creaciones orales artísticas, tienen
que aportar a nuestra educación, y ofrece secuencias didácticas.
Por su parte, ahora que las escuelas de bertsolaris se encuentran
en todo el territorio vasco, la coordinación de estas
escuelas externas a la reglada requiere un esfuerzo especial.
- La difusión: la difusión del bertsolarismo,
para que pueda efectuarse contenida y equilibradamente, tiene
varios frentes que tener en cuenta: cuidar la presencia que pueda
tener en los medios de comunicación, fomentarlo en diferentes
territorios mediante sesiones especiales, campeonatos, publicaciones,
y, en general, toda iniciativa relacionada con ella.
- Recopilación-investigación: otro punto importante consiste en recopilar
los frutos del bertsolarismo de una forma no global pero sí
sistemática, e insertar este campo cultural en los actuales
y futuros medios de investigación. El principal proyecto
para que el bertsolarismo sea objeto de erudición y análisis
y la apuesta estratégica de la Asociación es el
Centro de Documentación Xenpelar, que en estos momentos
cuenta con la dedicación de dos personas. Durante los
últimos casi 10 años la Asociación ha realizado
importantes inversiones en este proyecto, en cuya financiación
también participan las Entidades Públicas. Las
relaciones extranjeras se mantienen igualmente en esta dirección,
y se ha empezado a cooperar con Centros y a compartir experiencias
sobre la cultura oral y la improvisación de todo el mundo.
Es precisamente dentro de esta sección principal donde
tienen cabida las Jornadas de Bertsolamintza, los Encuentros
realizados en la UEU y en los Cursos de Verano de la UPV, las
investigaciones especiales, etc.
- Territorialidad: el territorio del bertsolarismo es el
del euskara. En la Asociación se ha implicado desde sus
comienzos gente de toda Euskal Herria. En el País Vasco
continental, en Gipuzkoa, en Álava-Bizkaia y en Navarra,
se ha erigido en cada uno de estos territorios una organización,
y la Asociación ahora mismo es la federación de
esas cuatro asociaciones. Y es que la Asociación de Amigos
del Bertsolarismo de Bizkaia, la Asociación de Amigos
del Bertsolarismo de Álava, los Amigos de Bertsolaris
de Navarra, Los Amigos de Bertsolaris del País Vasco Francés
y la Asociación de Amigos del Bertsolarismo de Gipuzkoa
componen la Asociación mediante federaciones. La territorialidad
está siempre presente no sólo en la organización,
sino también en los objetivos, dado que la Asociación
aspira a dirigir sus esfuerzos e inversiones especiales allí
donde la salud del euskara se muestre más debilitada.
Una forma de actividad social dentro
del ámbito cultural
Los amigos del bertsolarismo
hemos apostado por autocrear nuestra propia esfera que acoge
también los bertsolaris. Entre las claves de esta autocreación,
desarrolladas todas ellas intuitivamente, se podrían citar
las siguientes:
ðParticipación voluntaria de los implicados
ðAusencia de fronteras ideológicas y reconocimiento
de la diversidad interna
ðOrganización participativa y democrática
ðRespeto a lo local y subsidiariedad: primacía
de la territorialidad y del grupo frente al centralismo democrático
ðDesarrollo de la cultura del debate y de la diferencia
de posturas: conformidad elaborada
ðCombinación del trabajo voluntario y profesional.
Retribución del trabajo personal a nivel del mercado.
Nuestro nexo común lo
constituye el proyecto diseñado conjuntamente de una forma
intuitiva y paulatina transmisión, y que se materializa
en la difusión, investigación y territorialidad.
Las puertas permanecen abiertas para toda persona interesada
en participar en él.
Política de relaciones
La asociación estima de
gran interés varios ámbitos de relación
por los que encauzar su proyecto, motivo por el cual hoy día
se mantiene en contactos con:
ðOtras entidades sociales que giran en torno a la
actividad cultural vasca
ðLa Administración
ðPartidos políticos, movimientos sociales
y agentes privados de la sociedad vasca
ðProtagonistas de experiencias improvisadoras de
nivel internacional
En lo que respecta a la Administración,
la Asociación solicita y ofrece la financiación
y colaboración a las administraciones de Euskal Herria
para aquellos Proyectos (no todos) que entiende son de interés
público.
Nuestro proyecto es bastante
autónomo respecto a la situación política,
y es que:
ðNo se basa en la planificación o programación
trazada para la sociedad en general, sino en el convite y fuerza
de atracción de nuestra creación cultural.
ðLa actividad cultural en la que se fundamenta tiene
un alto nivel de autorregulación y depende de las ayudas
de los poderes públicos.
ðEl Proyecto Cultural del Bertsolarismo es igualmente
autónomo respecto a las políticas culturales de
cada momento. Parte de este Proyecto Cultural recibe la influencia
de las políticas culturales y educativas, y coopera con
los poderes públicos.
En vista de lo expuesto se puede
afirmar que en el caso de la Asociación de Amigos del
Bertsolarismo no es la administración la que decide la
manera en que han de hacerse las cosas dentro de su ámbito.
Por otra parte, tiene el derecho
y la obligación de informar a la sociedad en torno a los
pormenores de la cooperación (tanto sobre los aspectos
positivos como en los negativos), aun cuando el hacerlo conlleve
consigo en ocasiones ciertos enfrentamientos y el sacrificio
de alguna que otra subvención.
Durante los últimos años
estamos haciendo hincapié especialmente en lo referente
a las relaciones internacionales, mediante la participación
en encuentros internacionales sobre la improvisación oral,
y creando una red de contactos, con la esperanza de que en un
futuro Euskal Herria pueda llegar a ser un importante punto de
referencia sobre este tema.. Jon Sarasua, responsable de Comunicación
de Bertsozale Elkartea - Asociación de Amigos del Bertsolarismo |