Texto publicado en VASCONIA - Cuadernos de Historia-Geografía
de Eusko Ikaskuntza - Sociedad de Estudios Vascos en 1998, pp.
225-233
Resumen / Laburpena
/ Résumé
Introducción
1. NACIMIENTO
Y CIERRE
2. SUMISIÓN
AL PODER
2.1. Servicios
para la democracia
NOTAS
Resumen
Los 40 diarios que la dictadura
detentó bajo el nombre del Prensa del Movimiento, estuvieron
representados en Euskadi por "Hierro", "La Voz
de España", "Unidad" y "Arriba España".
Los cuatro, nacidos de las incautaciones, sirvieron de altavoz
ideológico a los sucesivos gobiernos. Su permanencia en
el mercado fue desigual. Razones políticas protagonizaron
cierres prematuros. A los franquistas no les gustó que
las páginas de los periódicos se abrieran a la
realidad social vasca
Laburpena
Prensa del Movimiento delakoaren
izenpean Diktadurak argitaratu zituen 40 egunkarietatik, "Hierro",
"La Voz de España", "Unidad" eta "Arriba
España" izenburukoak zegozkion Euskadiri. Lauak inkautazioetatik
sortu ziren eta ondoz-ondoko gobernuen bozgorailu ideologikoaren
eginkizuna bete zuten. Merkatuan izan zuten iraupen-aldia oso
desberdina izan zen. Haietako batzuk goiz itxi ziren, arrazoi
politikoak zirela bide. Euskal errealitate sozialari zabalduriko
egunkari orriak ez ziren franquisten gustukoak.
Résumé
Les 40 journeaux que la dictature
détint sous le nom de "Presse du Mouvement"
furent représentés en Euskadi par "Hierro",
"La Voz de España", "Unidad" et "Arriba
España". Ces quatre journaux, nés des saisies,
servirent de haut-parleur idéologique aux gouvernements
successifs. Leur permanence dans le marché fut inégale.
Des raisons politiques entrainèrent des fermetures prématurées.
Les franquistes n'apprécièrent pas que les pages
des journaux s'ouvrent à la réalité sociale
basque.
Bilbao, San Sebastián y Pamplona
fueron las plazas elegidas por el Movimiento para la implantación
de cuatro de sus más de cuarenta publicaciones repartidas
por 35 ciudades diferentes. Hierro, La Voz de España,
Unidad y Arriba España fueron los títulos
que aseguraron, desde su nacimiento, la difusión en Euskadi
de la ideología afín al Régimen, primando,
consecuentemente, la rentabilidad política frente a la
económica. No en vano, los responsables de esos diarios
sabían que detrás de una linotipia no hay un
papel, sino un pueblo, un conjunto de corazones e inteligencias
que esperan.
Al igual que sucediera con el
conjunto de medios que conformaron la Cadena de Prensa del Movimiento,
los rotativos asentados en el País Vasco fueron fruto
de las incautaciones practicadas a empresas y particulares tachados
de desafectos y marxistas. Esa labor correspondió a los
militares, gobernadores civiles y, muy especialmente, a falangistas,
cumpliendo órdenes de sus respectivas jefaturas provinciales.
Documentos existentes en el Archivo
General de la Administración, sito en Alcalá de
Henares, y en el Archivo Central del Ministerio de Cultura, en
Madrid, permiten afirmar que en las tres capitales vascas fueron
incautadas las imprentas de Marcelino Ibáñez Miguel,
de Ramón Bengaray y de Ricardo y Luis Leizaola Ibarburu,
respectivamente. También que en esos mismos lugares se
procedió a la expoliación de los periódicos
"Euskadi", "El Liberal", "El Nervión",
"La Voz de Navarra", "Guipúzcoa Obrera",
"El Pueblo Vasco", "La Voz de Guipúzcoa"
y "El Día". Los tres primeros estaban asentados
en Bilbao, el cuarto en Pamplona, y los restantes en San Sebastián.
Los bienes requisados fueron
distribuidos entre los distintos rotativos, aunque el grueso
no salió de las provincias vascas. Así, a Arriba
España se le adjudicó el material de "La
Voz de Navarra", a Hierro, el de "Euzkadi"
y "El Liberal", a La Voz de España, el
de "La Prensa", "La Voz de Guipúzcoa",
"Guipúzcoa Obrera" y "El Pueblo Vasco",
y a Unidad, el de "El Día".
1. NACIMIENTO
Y CIERRE
Con esos materiales, el día
1 de agosto de 1936 salía de la calle Zapatería,
50, de Pamplona, el primer número del matutino Arriba
España, fundado por el sacerdote Fermín Yzurdiaga
y el escritor Angel María Pascual. Hasta el 30 de junio
de 1975, fecha en la que desapareció, fue el diario que
más y mejor difundió las ideas falangistas, y las
consignas del Caudillo y de sus respectivos gobiernos.
La orden de cierre fue dada por
Emilio Romero, en su etapa de Delegado Nacional de Prensa, desde
el convencimiento de que había que terminar con todos
los pesos muertos y explotaciones marginales, a fin de encontrar
el necesario equilibrio entre la rentabilidad ideológica
y la económica. En este sentido hay que decir que desde
1970 y hasta junio de 1975 Arriba España acumuló
un déficit de 49.558.879 pesetas.
En circunstancias similares al
anterior, y con la asignación de idénticos objetivos,
el 5 de julio de 1937 nació el vespertino bilbaíno
Hierro, bajo la dirección de José Antonio
Giménez Arnau. En esta ocasión, y hasta la ocupación
en 1950 del inmueble propiedad de la familia Prieto, ubicado
en Obispo Orueta, 2, tuvo distintos asentamientos. El primero
fue Correo, 17, lugar en el que se editaba "Euzkadi".
Con posterioridad utilizó los locales de Ledesma,6, propiedad
de "El Correo Español-El Pueblo Vasco", y Gran
Vía, 13, perteneciente a los propietarios de "El
Noticiero Bilbaíno". En ambos casos el uso de las
instalaciones estuvo precedida de acuerdos y contraprestaciones.
La maquinaria instalada en Ledesma, 6, procedía del aludido
periódico nacionalista "Euzkadi".
Hierro se mantuvo en el mercado hasta febrero de 1983.
Aunque en 1982 se anunció su venta en pública subasta,
ésta no se llevó a efecto; existía una demanda
de reclamación interpuesta por la única superviviente
de la familia Prieto, Constancia Prieto, quien en 1985 consiguió
recuperar el edificio propiedad de su hermano, Luis, y que su
padre, Indalecio, recibió en herencia a la muerte de su
hijo.
La tardía desaparición
de este diario lo justifica el interés político
que su ubicación despertaba; económicamente no
ofrecía mejores resultados que el anterior. Tomando como
muestra los cinco años anteriores y posteriores al fin
de la dictadura, el balance de los distintos ejercicios fue:
Tabla 1.- Cuentas de resultados de
Hierro, correspondiente a los años 1970-1980.
Elaboración propia. Fuente: Archivo Central del Ministerio
de Cultura.
Años |
Cantidades
(en pesetas) |
1970 |
-2.056.368 |
1971 |
-408.133 |
1972 |
-1.552.453 |
1973 |
-3.177.843 |
1974 |
-6.525.527 |
1975 |
-16.549.716 |
1976 |
-18.373.391 |
1977 |
-37.906.958 |
1978 |
-55.935.911 |
1979 |
-62.236.044 |
1980 |
-77.217.119 |
TOTAL |
-281.939.463 |
Unidad y La Voz de España, ambos de San
Sebastián, fueron dos periódicos que prácticamente
vivieron en paralelo. El primero, de carácter vespertino,
fue, por su cercanía a la sede de la Jefatura de Prensa
y Propaganda, el órgano oficioso de Falange. El segundo,
matutino, el de mayor penetración y difusión. De
este último se hacían seis ediciones diarias. Sus
rutas eran: Alava, Burgos, Logroño y Miranda de Ebro;
Irún, Rentería, Pasajes y Vera de Bidasoa hacia
Pamplona; Tolosa, Billabona y Beasain hacia el norte; Zarautz,
Getaria, Deba, Azpeitia, Azkoitia y pueblos de la costa; Eibar,
Elgoibar, Begara y Mondragón hacia Bilbao; San Sebastián
y todo su distrito.
Los dos se pusieron a la venta
el 16 de setiembre de 1936. Unidad en la casa número
12 de la calle Víctor Pradera. La Voz de España,
en San Marcial, 8 y 10, lugar en el que se editaba el diario
incautado "La Voz de Guipúzcoa". En la década
de los setenta pasaron a compartir los locales de la calle José
María Soroa, 25, comprados el 1 de marzo de 1965 a "Gustavo
Marssé y Cía., Sociedad en Comandita".
No sólo la trayectoria
de estos medios fue común mientras permanecieron en activo.
También vieron juntos el final de sus días. En
febrero de 1980 una misma orden, rubricada en Madrid, dejaba
en silencio 44 años de historia. Las razones fueron una
vez más económicas, pero si bien es cierto que
sus balances no eran positivos, como puede verse en la tabla
2 que se acompaña, documentos internos apuntan que fueron
políticas. De hecho había otras explotaciones,
con índices negativos superiores, que no se cerraron hasta
cuatro años después, y según datos de un
informe, datado el 4 de julio de 1981, el año en que fueron
suspendidos tenían previsto ingresar 336 millones de pesetas.
Tabla 2.- Cuentas de resultados de
Unidad y La Voz de España, correspondiente a los años
1970-1980.
Elaboración propia. Fuente: Archivo Central del Ministerio
de Cultura.
Años |
Cantidades (en pesetas) |
Unidad |
La Voz de España |
1970 |
-1.889.869 |
19.998.437 |
1971 |
-3.151.914 |
22.163.259 |
1972 |
-3.636.116 |
28.862.254 |
1973 |
-5.276.908 |
34.897.382 |
1974 |
-9.252.472 |
41.396.006 |
1975 |
-16.502.369 |
12.473.741 |
1976 |
-19.660.520 |
9.273.040 |
1977 |
-36.058.605 |
-21.225.910 |
1978 |
-46.783.421 |
-38.211.034 |
1979 |
-53.610.334 |
-36.795.035 |
1980 |
-73.299.818 |
-164.449.006 |
TOTAL |
-269.122.346 |
-91.616.866 |
Las apuntadas razones políticas
quedaban plasmadas en distintos informes, como fueron los emitidos
en 1978 y 1979, en los que se dejaba ver el interés de
las autoridades preautonómicas por los periódicos
de titularidad pública, y su deseo de influir en la línea
editorial, así como la conflictividad laboral que se vivía
en el Organismo, con especial relevancia -se decía-
en los periódicos ubicados en zonas o regiones próximas
a obtener sus respectivos Estatutos de Autonomía. Es el
caso de "La Voz de España" y "Unidad",
donde la presión de los trabajadores está llegando
a que aparezcan notas y comunicados elaborados por ellos mismos,
cuyo contenido pudiera considerarse anticonstitucional y atentatorio
a la normativa legal existente.
Esas y otras manifestaciones
tuvieron sus antecedentes en 1977, cuando el entonces director
de La Voz de España , Miguel Larrea, pretendió
sustituir, en un cuadernillo dominical, el título impreso
en la cabecera por el de La Voz. La sugerencia fue muy mal recibida
en Madrid y también por el Delegado en Guipúzcoa.
En una carta remitida por éste al Director General del
Régimen Jurídico de la Prensa, fechada el 16 de
abril de 1977, se decía: la aparición de ese
cuadernillo extraordinario con el titular del periódico
mutilado se prestará a toda clase de interpretaciones,
relacionadas con el rumor de que el periódico prescindirá
en fecha breve de la palabra España en su titular.
Una polémica similar volvió
a repetirse en junio de ese año. En esta ocasión
era Unidad el que quería publicar, diariamente,
una página con texto en francés, informando de
la zona fronteriza, y sobre todo, con publicidad de esos departamentos
del vecino país. Al Delegado en San Sebastián
le parecía que la pretensión tenía en
su contenido mucho de política, por lo que pidió
asesoría a Madrid.
A partir de esa fecha los dos
periódicos fueron analizados a diario. Puntualmente, cualquier
indicio que hiciera sospechar que no cumplían las directrices
marcadas desde los servicios centrales era notificado. La
Voz de España y Unidad acabaron convirtiéndose
casi en una obsesión para los altos cargos. Los responsables
del Organismo temían que la unidad nacional se rompiera,
y decidieron actuar con firmeza y sin dilaciones. El ambiente
y la situación preautonómica justificaba aún
más esa postura.
Reflejo de lo expuesto fueron
los partes de prensa, que el Delegado redactaba cada jornada,
para poner en conocimiento de la Jerarquía lo que publicaban
uno y otro diario. Uno de esos partes, elaborado el día
19, y relativo al diario matutino del 18, señalaba textualmente:
"La Voz de España" inicia una sección
titulada "Informe". "La Voz. Guía Electoral".
Comienza dando cuenta del programa del Partido Acción
Nacionalista Vasca. En él incluye manifestaciones como:
"forma de Gobierno republicano", y hace continuas alusiones
a la nación vasca. En este punto y porque pudiera rozar
la unidad nacional, salvaguardada en el Decreto de 1 de abril,
copio textualmente lo que este periódico cita: "Acción
Nacionalista Vasca declara que el pueblo vasco no debe tener
más norma reguladora de su destino que su propia y soberana
voluntad. Sin injerencias ni tutelas de poderes extraños
y sin más limitaciones que las que puedan derivarse de
convenios internacionales libremente pactados".
Esas razones
políticas que de los informes se desprenden fueron rápidamente
interpretadas por un amplio sector de la opinión pública.
En la capital donostiarra fue la única motivación
que se aceptó. En El libro de La Voz y Unidad,
sacado por los trabajadores, se dice abiertamente que las dos
publicaciones fueron guillotinadas por tratar de aproximarse,
simplemente, a la realidad del pueblo que compra los periódicos
cada día, y al que deben servir. Cuando decimos que "La
Voz" y "Unidad" fueron cerrados a cal y canto
por motivos políticos, estamos diciendo que fueron clausurados
por negarse a hacer la política desinformativa y manipuladora
que pretendía UCD (1).
Movido
por esa misma sospecha, el Diputado de Euskadiko Ezkerra por
Guipúzcoa, Juan María Bandrés, presentó
una interpelación al Gobierno. De las tres preguntas que
formuló, en la segunda cuestionaba: Si las razones
han sido de índole económica, ¿por qué
se ha tomado la medida precisamente al comienzo de la campaña
electoral al Parlamento Vasco? (2)
.
La respuesta que recibió
el Diputado no satisfizo ni a él ni a los socialistas,
por eso el 29 de setiembre sometió a la aprobación
del Congreso la petición de que el Ministerio de Cultura
o el Consejo de Ministros revocara el acuerdo y ordenaran la
reanudación de la actividad tan pronto como técnicamente
fuera posible. También pidió el voto afirmativo
para que se iniciara de inmediato la negociación en el
seno de la correspondiente Comisión de Transferencias,
para que la titularidad de ambos diarios pasara a los poderes
públicos vascos, a fin de que continuaran su publicación
bajo el control del Parlamento autónomo. Ninguna de las
dos propuestas encontraron el apoyo necesario.
Juan María Bandrés
se dirigió una tercera vez a la Mesa del Congreso. En
la respuesta que preparó el Director Gerente se volvieron
a alegar razones estrictamente económicas y no políticas.
Tal fue la causa, y en ningún caso que los periódicos
no siguiesen la línea ideológica formada por el
partido que forma el Gobierno -rezaba el texto-. Ni se
dan consignas a los periódicos, ni se han dado. Sólo
se les reclama pluralismo y respeto a la Constitución.
Nada más y nada menos.
2. SUMISION
AL PODER
Las cuatro publicaciones ubicadas en Euskadi vivieron sujetas
al poder y a sus intereses. Para ello se fijaron las estructuras
y servicios necesarios. A la censura se sumaron las notas, órdenes,
consignas y sugerencias que llegaban a diario a las mesas de
las redacciones. Su cumplimiento y difusión eran objeto
de inspección y vigilancia, incluso después de
la muerte de Franco, una vez integrada la Cadena en el Organismo
Autónomo Medios de Comunicación Social del Estado
(MCSE).
En ese sentido, el primer servicio
se creó en 1940 con el nombre: Sección de Colaboraciones.
Sus responsables seleccionaban las materias, en cumplimiento
a las consignas emanadas de la superioridad o a propuesta del
jefe de la sección. Los artículos dispuestos para
la difusión debían reunir los siguientes requisitos:
Fidelidad a la consigna propuesta; Estilo claro, culto y conciso;
Interés nacional, actualidad, precisión y amenidad.
La producción del equipo
estuvo siempre considerada como complemento a la información
diaria que se ofrecía desde las páginas de los
rotativos. Siempre se intentó que un determinado artículo
no fuera difundido en dos diarios de la misma región y
en idéntico día. Lo que hoy publicaba Unidad
mañana lo hacía La Voz de España.
Igual criterio se seguía con Hierro y Arriba
España.
A ese servicio
le siguió, el 1 de mayo de 1942, la denominada Sección
de Publicaciones y Consignas. Su función era remitir,
documentada y directamente, las consignas dimanadas del Estado
y su Gobierno, para que cada campaña contara con la garantía
de la máxima eficacia y éxito. La publicación
o no de lo ordenado, así como la forma y lugar, quedaba
registrado en las "Hojas de Inspección". Un
ejemplo del trabajo elaborado en esa sección es el escrito
cuyo extracto se transcribe (3) :
De ahora en adelante, hasta
nueva orden, ese periódico editará editoriales
y artículos firmados en defensa de la tesis española
sobre lo injusto e ilegítimo de las campañas exteriores
contra nuestro país.(...). Los directores de periódicos
han de tener en cuenta que esta campaña ha de ser de ahora
en adelante un motivo constante de ocupación para sus
secciones de editoriales y para sus artículos políticos
de colaboración, y teniéndolo así presente
se ocuparán de regular la periodicidad y todas las modalidades
de la campaña. A continuación se reseñan
los puntos principales sobre los que obligatoriamente ha de ocuparse
ese periódico:
- España rechaza el
supuesto de que exista en la nación ningún problema
político fundamental que solucionar, pues fracasados en
su día todos los intentos de avenencia entre los sectores
en pugna, resolvió su propio problema hace más
de seis años con la victoria de las armas nacionales,
de análoga forma a como, fracasados los procedimientos
pacíficos de convivencia, resolvió el mundo los
suyos mediante la última guerra (...)
- La política interna
de la nación española, cosa exclusiva de los españoles,
se desenvuelve, por otra parte, bajo las miradas del mundo, "con
luz y taquígrafos".
- España no admite
el papel que frecuentemente se intenta atribuírsele de
pararrayos que desvíe las tormentas interiores de los
otros países. (...).
- La debilidad y el sometimiento
no traen jamás la paz, pues con el deshonor va siempre
la ruina y la esclavitud. La libertad y la independencia no son
un regalo que hayamos de recibir de nadie ni mendigar en las
Cancillerías extranjeras, sino algo que hemos de merecer
y de mantener con nuestro propio esfuerzo.
- El que llevemos atajando
desde hace más de seis años este mal y disfrutemos
interiormente de una paz bien ganada, no quiere decir que se
hayan acabado para nosotros los deberes. No han prescrito con
esto los fines de nuestra Cruzada; el mandato de nuestros muertos
sigue imperativo y si ha terminado la batalla clara, nos ha quedado
la batalla de cada día, el esfuerzo oscuro de cada hora.
A lo apuntado
hay que añadir la labor realizada por los censores a través
de los negociados de Censura y de Información y Censura
(4) . Desde este último se
autorizaba o denegaba la publicación de unas u otras noticias,
y se servían los llamados "entrefiletes" o frases
que se intercalaban en el texto sin que los mensajes tuvieran
relación alguna con la información que se ofrecía.
Muestra de ello son los ejemplos que se citan, correspondientes
a los años 1940 y 1954 (5)
:
(1940)* La Sección Femenina entiende que uno de
los principales problemas de España es la vivienda. Por
eso ofrece su colaboración abnegada al Instituto Nacional
de la Vivienda, ordenando a sus afiliadas la propaganda y ayuda
a este Instituto.
*Hay que elevar a todo trance
el nivel de la vida del campo, vivero permanente de España.
La Sección Femenina, siempre en acto de servicio para
el cumplimiento del programa de la falange, prepara a sus camaradas
para una gran campaña de divulgación sanitaria
en los medios rurales.
(1954)*La libertad de pensamiento sólo puede consistir
en la independencia frente al error, en la obediencia y en la
servidumbre interior y exterior a la verdad.
*¿Puede el Estado mantenerse
inerme y abandonar a la prensa de su país a un posible
coloniaje?.
*Queremos un Estado en cuyo seno pueda lograrse la armonía
fecunda del binomio obediencia-libertad.
*La libertad de divulgación
está condicionada por el servicio y la sumisión
a la verdad.
*Las libertades civiles como
las entiende el liberalismo son "libertades de perdición".
*Los principios que han guiado
y guían la política española de prensa durante
estos años son conformes a la razón natural y a
las enseñanzas católicas.
*Liberarse del liberalismo no
es renunciar a la libertad sino todo lo contrario, ponerse en
condiciones de adquirir una libertad más auténtica.
*La obra de Franco y del Movimiento
Nacional constituye el máximo de las posibilidades políticas.
*Si el Movimiento Nacional no
existiera tendríamos necesidad de inventarlo.
El registro más fiel de
la actividad desarrollada por los censores sobre la información
a ofrecer por los periódicos, lo constituyeron los libros
de censura. Bajo el epígrafe "Libro de Censura",
en cada hoja quedaban adheridas, día a día, las
galeradas y/o fotografías sometidas a inspección.
Los encargados de filtrar las informaciones debían cumplimentar,
además, una serie de datos con los que quedaba registrado:
el título de la publicación, la fecha, el nombre
del censor, el motivo de la censura, la fecha de la aparición
del número al que correspondía lo censurado, la
fecha de la comprobación, el funcionario que la realizaba
y observaciones. Ninguna sección quedó libre. Todas
se vieron pisados por el sello de "prohibido" o el
de "pase salvo lo tachado".
2.1. Servicios
para la democracia
Con la instauración de
la democracia, y más concretamente con la victoria en
la urnas de los socialistas, todo hacía pensar que la
etapa de dirigismo había llegado a su fin. Sin embargo,
fue entonces cuando las voces de denuncia se hicieron públicas,
lo que provocó continuos desmentidos.
Las buenas palabras empero pronto
se desdibujaron. La continuidad de la Sección de Colaboraciones
era latente. En el calendario correspondiente al año 1983
su actividad aparecía vigente aunque renovada. Se había
sustituido a antiguos colaboradores, ligados políticamente
a la etapa anterior, y ampliado con la incorporación
de algunos periodistas procedentes de la Cadena y firmas de prestigio,
entre las que se encontraban las de Aranguren, Savater, Martín
Patino, González Ruiz, Juan Cueto, etc.
Ese mantenimiento
lo ponía de manifiesto, el 10 de enero, la directora del
Departamento Técnico de Prensa de Medios de Comunicación
Social del Estado, Malen Aznarez, con el documento que se detalla
y que envió a todos los directores de MCSE (6)
:
Querido compañero:
Mañana se reanudará el servicio de colaboraciones
que ha quedado interrumpido durante los últimos días.
Aunque de momento no se realice a pleno rendimiento, quiero ir
mandándote material para que puedas utilizarlo a tu gusto
y conveniencia.
A continuación te detallo
el material diario y semanal que está previsto recibas
en breve:
DIARIO: Editorial crónica
política, información de RTVE, artículo
de una firma conocida, y una entrevista o reportaje.
SEMANAL: Crónica cultural;
Crónica de economía; Información crítica-cinematográfica;
Información internacional.
Quiero recordarte la necesidad
de que, tanto la crónica política como el artículo
de firma se den absolutamente íntegros, sin mutilaciones
que pudieran surgir por falta de espacio.
Espero tu opinión y
todo tipo de sugerencias o aportaciones sobre el tema, que puedan
redundar en un mejor servicio para los periódicos de MCSE.
Mayor confirmación, si
cabe, la puso de manifiesto el propio ministro de Cultura, Javier
Solana, cuando en respuesta a una interpelación efectuada
por Miguel Roca, de Minoría Catalana, ante el Pleno del
Congreso, se comprometió a dar las órdenes oportunas
para que se dejara de enviar editoriales e instrucciones de tipo
ideológico a los directores de los periódicos de
la cadena estatal.
Las palabras
del titular de Cultura desataron -como algún medio recogió-
"la caja de los truenos". Desde los medios privados
se cuestionó el estado de las libertades; se habló
de escándalo, de opinión dirigida, de editorialistas-funcionarios
y de medios de propaganda (7). Los
gobernantes necesitaron, para su defensa, las páginas
de los diarios por ellos controlados y las de El País.
A pesar del esfuerzo no se logró desviar la atención.
ABC y Diario 16, entre otros, siguieron con sus
campañas. Mientras el primero hablaba de depuraciones
por motivos políticos y despilfarro del dinero público
en los MCSE, el segundo de metamorfosis en el Gobierno.
Justino Sinova aprovechó la crónica que ese último
título envolvía para analizar lo que estaba sucediendo
en la trastienda del Ejecutivo. En su crónica recordaba que el
Gobierno tenía pendiente demostrar a la sociedad española
su respeto y su defensa de la libertad de expresión. Para
ello -manifestaba- tendría que empezar por impedir,
primero, la manipulación de los periódicos del
Estado y por privatizar, después, toda la cadena. (...)
(8) .
NOTAS
- El libro
de La Voz y Unidad. Hórdago
San Sebastián. 1982.Págs. 18 y 19.(VOLVER)
- La interpelación
fue recogida en el Nº 313-I del Boletín Oficial de
las Cortes Generales. Congreso de los Diputados, de 6 de marzo
de 1980.(VOLVER)
- Fuente,
cit.(VOLVER)
- Información
y Censura dependía de la Dirección General de Prensa
del Ministerio de Información y Turismo, siendo una sección
más de "Prensa Nacional". La unidad en el nombre
no se mantenía en las funciones. Información tenía
como misión distribuir consignas a los periódicos
en general y enviar notas de prensa. Fuente: Archivo General
de la Administración. Caja 1369.(VOLVER)
- Ejemplos
como los recogidos pueden encontrarse en distintas cajas de los
archivos oficiales. Los aportados proceden de las número
75 y 68442, que se conservan en el Archivo General de la Administración
y en el Ministerio de Cultura, respectivamente.(VOLVER)
- El documento,
numerado con el 1, salió de Paseo de la Castellana, 272.
Fuente: Archivo Central del Ministerio de Cultura. Caja 95976.(VOLVER)
- Ver: El
Correo de Andalucía y Diario 16 del 13 de mayo
de 1983, página 2; ABC, de la misma fecha, página
15; La Crónica y El Día de Baleares del
sábado 15 de mayo. Página 2.(VOLVER)
- La crónica:
"Metamorfosis en el Gobierno", de Justino Sinova, fue
publicada en la página 2, de Diario 16, correspondiente
al día 16 de mayo de 1983. (VOLVER)
Begoña
Zalbidea Bengoa. miembro del Dpto. de Periodismo en la Fac. de
CC. Sociales y de la Comunicación de la Univ. del País
Vasco |