Para
John Lennon "la vida es aquello que te va pasando mientras
te empeñas en hacer otros planes". Y, probablemente,
esta directora navarra -Tudela 1955-, sabe mucho acerca de esta
reflexión, porque esa parte de su vida relacionada con
el cine está basada en la experiencia que surge del azar,
obviamente fuera de toda lógica premeditada.
Licenciada
en Medicina por la Universidad de Zaragoza, Ana Díez decide
ir a México a hacer el doctorado en salud pública.
Allí es cuando siente que el azar, ese espacio carente
de sentido, irrumpe en ella: se matricula en el Centro de Estudios
Cinematográficos presidido por Luis Buñuel, donde
adquiere su formación como cineasta durante tres años.
A partir de aquí, todo rueda entre metros de celuloide,
quedando materializadas dos obras: "Elvira Luz Cruz: Pena Máxima",
documental ganador del premio de la Academia Mexicana de Ciencias
Cinematográficas y de la Asociación de Críticos
Cinematográficos Mexicanos, además de ser el film
que representó a México en el Congreso Internacional
de Mujeres en Nairobi (Kenia), y "Ander eta Yul", largometraje
de ficción galardonado con el Goya al Mejor director novel
y representante del Estado español en los festivales internacionales
de cine de mujeres de Creteil (Francia) y de Mar de Plata (Argentina).
En 1996 realiza su segundo largometraje "Todo
está oscuro".
"La mafia de
la habana" estrenado en el
2000 es su segundo documental. En el 2001 exhibe el largometraje
de ficción "Algunas chicas
doblan las piernas cuando hablan"
y actualmente está rodando la película "Galíndez".
LA HISTORIA DE UNA
EXCEPCIÓN
Parece ser que toda
excepción confirma una regla. La presencia de una irregularidad
que se evapora de la homogeneidad nos habla de la existencia de
una norma, posiblemente privilegiada. Así pues, la excepción
es el término que separa unidad de diferencia, la barra
entre esos dos conceptos.
Y el hecho excepcional,
en este caso, se personifica en la figura de la directora Ana
Díez. Ella es la primera directora vasca que realizó
un largometraje de ficción. Junto al nombre de esta directora
podemos nombrar otras dos mujeres de origen vasco que se han colocado
detrás de una cámara para dirigir a lo largo de
la historia del cine vasco: Arantxa Lazcano (Zarauz, 1950), "Maider",
1989, cortometraje y "Urte
ilunak" (Los años oscuros,
1993, largometraje) y Mirentxu Purroy (Pamplona, 1949), "Momentos",
1980, cortometraje; "Herederos
de la calle", 1985; "Violencia
oculta", 1985; "Burbujas
en los dedos" ,1985, todos
ellos documentales y por último, el largometraje "Denboraren
Gibelean", (Detrás del
tiempo, 1993) (1). Su
presencia en el interior de la producción cinematográfica
vasca de la década de los ochenta, como en otras épocas,
es un dato anacrónico que resquebraja la uniformidad del
conjunto. Ella crea una ruptura por donde se filtra la heterogeneidad.
La directora, Ana Díez, es el único y el primer
nombre femenino, que resuena no sólo durante los años
ochenta, sino también en los periodos anteriores, en el
ámbito cinematográfico vasco. De hecho, las películas,
-hasta un total de 35- producidas dentro de la industria cinematográfica
del País Vasco, durante la década de los ochenta
fueron realizadas por directores a excepción de "Ander
eta Yul" dirigida por Ana Díez.
Una
década, la de los ochenta, que gracias a la política
de subvenciones llevada a cabo por la Consejería de Cultura
del Gobierno Vasco, como por el Ministerio de Cultura del Gobierno
Español, quedó marcada por "un
aumento considerable de la producción cinematográfica"
en el País Vasco, tal y como señalan los autores
del libro "Ilusión
y realidad. La aventura del cine vasco en los años 80"(2).
Así pues, 35 largometrajes, realizados
por 28 directores diferentes, fueron estrenados y producidos por
productoras ubicadas en la Comunidad Autónoma Vasca durante
la década de los 80 (3).
Y "Ander
eta Yul"
de Ana Díez fue una de ellas. Con la doble finalidad de
"incentivar la creatividad y abrir vías de acceso
a proyectos novedosos sin desperdiciar la experiencia adquirida
en la corta pero productiva vida del llamado cine vasco",
el Departamento de Cultura y Turismo del Gobierno Vasco convoca
en 1987 un Concurso de Guiones Cinematográficos de Largometraje
-orden 14 de octubre, BOPV-. El guión seleccionado, premiado
con un millón y medio de pesetas, fue "Ander
eta Yul"
de Angel Amigo que será llevado posteriormente a la pantalla
por Ana Díez (4).
De este modo, "Ander
eta Yul" se
produce por Igeldo Zine Produkzioak (San Sebastián)
y se estrena en 1988. Un año después gana el Goya
a la mejor dirección novel y el premio a la mejor película
en el Festival de Bogotá.
Así pues,
Ana Díez y su película "Ander
eta Yul" significan la diversidad
nominal dentro de la producción cinematográfica
vasca no sólo de los años ochenta, sino de tiempos
anteriores. Ella es la anomalía que corrobora la idea de
que el mundo cinematográfico es un espacio compacto por
donde retumban, tanto en el ámbito industrial como en el
discursivo, las voces masculinas.
Bibliografía
FLITTERMAN-LEWIS, Sandy, To
desire differently. Feminism and the french cinema, USA,
University of Illinois Press, 1990.
DE MIGUEL MARTINEZ, Casilda, REBOLLEDO
ZABACHE, José Angel, MARIN MURILLO, Flora, Ilusión
y realidad. La aventura del cine vasco en los años 80,
San Sebastián, Filmoteca Vasca,1999.
SILES OJEDA, Begoña, La
mirada de la mujer y la mujer mirada. (En torno al cine de Pilar
Miró). Tesis Doctoral (inédita), Departamento
de Comunicación Audiovisual y Publicidad, Facultad de
Ciencias Sociales y de la Información, Universidad del
País Vasco,1998, Directora Casilda de Miguel.
(1) Siles Ojeda, Begoña,
La mirada de la mujer y la mujer mirada. (En torno al cine de Pilar
Miró) Tesis Doctoral (inédita), Departamento de Comunicación
Audiovisual y Publicidad, Facultad de Ciencias Sociales y de la
Información, Universidad del País Vasco, 1998, Directora,
Casilda de Miguel. (VOLVER)
(2) Miguel de Martínez, Casilda, Rebolledo
Zabache, José Angel, Marín Murillo Flora, Ilusión
y realidad. La aventura del cine vasco en los años 80, San
Sebastian, Filmoteca Vasca, 1999, pág. 21. (VOLVER)
(3) Ibid, pág. 31. (VOLVER)
(4) Ibid, pág. 27 (VOLVER)
Begoña
Siles Ojeda, Departamento de
Comunicación Audiovisual y Publicidad, Facultad de Ciencias
Sociales y de la Información. UPV/EHU |